Sergio Peñamaría de Llano

Sergio Peñamaría, el alcalde que construye Alvedro

En O Barco de V aldeorras se solicita que le sean retirados los honores al abogado de A Fonsagrada

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El Progreso 16/02/2022

EL PERSONAJE ES polémico. Vaya por delante ese reconocimiento por si alguien pudiera pensar que se oculta o desconoce. Son muy recientes las acusaciones que desde O Barco de Valdeorras se dirigen contra Sergio Peñamaría de Llano (A Fonsagrada, 1914), por su pertenencia al I Tercio de la III Bandera de la Legión  y por la persecución de los huidos de aquella zona tras la guerra en acciones represivas de extrema dureza.  
 
También en O Barco de Valdeorras conoce a María del Rosario Suárez Quiroga, sobrina de la escritora Elena Quiroga, con la que se casa.

Era hijo del registrador de la propiedad homónimo _ y Flórez de Sierra _, que en 1909 llega a la alcaldía de A Fonsagrada, y de Elisa de Llano Valdés y González Reguerín, hija a su vez del diputado asturiano Llano Valdés.

Cuando ya ha cumplido los 45 años, Camilo Alonso Vega, ministro de la Gobernación lo nombra para regir A Coruña. Entonces la prensa le advierte que deberá luchar contra la fama del “más querido de los alcaldes desde que La Coruña es Coruña”, Alfonso Molina Brandao. Y añade: “Es de Fonsagrada, pero reside aquí desde hace 36 años”, para que nadie sienta que llega un forastero a Marineda.

Se lo comunica por teléfono el gobernador manchego Evaristo Martín Freire, con el que tendrá buenas relaciones en algunos de los proyectos más ambiciosos para la ciudad.

Por eso, ese fuerte sentimiento localista, que a su vez es abierto y acogedor, le inspira el eslogan turístico que por sí solo hace de Sergio Peñamaría un personaje histórico en la capital herculina, “la ciudad en la que nadie es forastero”.

En ese momento de 1959, Peñamaría ya es comandante del Cuerpo Jurídico Militar como fiscal jefe de la Octava. En su biografía oficial se destaca que había sido combatiente voluntario y que pertenece a la bandera de la Legión ya citada. Resulta herido en los frentes del Ebro y de Teruel. 

Su título de vecindad le viene de sus años estudiantiles, pues allí hace el Bachillerato, aunque la familia sigue vinculada a Fonsagrada, su padre como abogado, y su tío Joaquín como farmacéutico.

También hace en A Coruña la carrera de Derecho, matriculado por libre en Santiago. Su debut en los estrados se produce en abril de 1936, a las puertas del conflicto. El caso merece la pena ser recordado, pues defiende a un hombre, vecino del lugar de Pazos, en Ferrol, que se había casado dos años antes y que por ser de edad madura, sufre una cencerrada por parte de unos jóvenes vecinos. El hombre sale de su casa hecho una furia y agrede a uno de ellos con heridas que tardan tres meses en curar. 

Comienza a preparar las oposiciones al Cuerpo Jurídico Militar, pero en julio ya solo se habla de guerra, en la que gana tres cruces, la del Mérito Militar, la de Sufrimientos por la Patria y la de la Campaña de la Liberación de Oviedo, así como otras condecoraciones.

Su primer destino es Bilbao, aunque pronto será trasladado a la Auditoría Militar coruñesa.

Como alcalde su nombre está unido a la construcción del aeropuerto de Alvedro _ que le impiden inaugurar _, a la refinería, las factorías de Coca-Cola y Celtiberia, la fuente de Cuatro Caminos, el parking de la plaza de Vigo, y el mirador de Os Castros, entre otras obras.

Menos conocido es el día en que entrega dos regalos a un matrimonio norteamericano para que se los haga llegar a los hijos de J.F. Kennedy, Carolina y John John, en nombre de los niños coruñeses, una muñeca gallega y una gaita.

Muere en diciembre de 2004.

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