EL DIRECTOR de El Progreso y vecino de O Cádavo, Alfonso Riveiro, dio el pistoletazo de salida a las fiestas de San Cristovo con un pregón marcado por el agradecimiento a su tierra y la preocupación por la despoblación. El periodista habló de sus vivencias infantiles, profundizó en la historia de O Cádavo y resaltó el gran paraíso natural que alberga. Si algo lamenta —dijo— es que Baleira haga honor a su nombre con la sangría demográfica que sufre y para la que pidió soluciones. A sus vecinos les dio las gracias por acogerle con "tanto agarimo" y ayudarle a ser mejor persona.
El director de El Progreso, que se mostró orgulloso de "ser profeta" de su tierra por un día, fue presendo por el alcalde, Ángel Enrique Martínez Puga.