Una pandemia global no es suficiente para que el IES de Becerreá deje de debatir. Anne Rodrígez, Alba Busto, Nerea López y Ainhoa Fernández son las cuatro alumnas de 4º de Eso que se presentaron este curso al Parlamento Xove. "Si participamos es porque ellas quisieron hacerlo", sostiene el jefe de estudios del centro, Jesús Folgueira, que lleva cinco años como coordinador en esta liga de debate.
La primera fase del concurso se realizó una semana antes del confinamiento por Covid-19 en A Coruña. Allí, las jóvenes se clasificaron para la ronda final, que se llevó a cabo el 29 de junio por videollamada. "Ese día nos reunimos en el instituto. Cada una conectó su ordenador a la red wifi y utilizamos unos cascos gamer", explica la oradora inicial del equipo, Anne Rodríguez. "Hubo algún problema técnico con las cámaras pero lo solucionamos fácilmente", declara la joven de 16 años.
El equipo becerrego preparó dos posturas diferenciadas, a favor y en contra, sobre si se deberían incrementar las sanciones para las personas y empresas que no respetan el medio ambiente. "O máis importante é saber improvisar e levar a contraria", declara Alba Busto desde su rol como refutadora. Más allá de sus opiniones personales, las debatientes aprenden a defender una visión concreta del tema a debatir.
A pesar de ser su primera vez como integrantes de este grupo de debate, las cuatro alumnas consiguieron el segundo puesto en el concurso, detrás del CPR Plurilingüe Sagrada Familia de Vilagarcía de Arousa que resultó ganador de esta undécima edición del Parlamento Xove.
Trabajo y constancia son los dos adjetivos que mejor definen al equipo, y es que ellas no dejaron de practicar y buscar nuevos argumentos desde sus casas. "Ensayamos online por videollamada y también de forma individual", dice Anne. "As dúas semanas antes da final comezamos a debater entre nós de forma presencial", manifiesta Alba. Las jóvenes promesas realizaban quedadas online con su coordinador para organizar el trabajo. "Tomamos todas las medidas de precaución necesarias para ensayar y para llevar a cabo la final en el centro educativo", asegura el jefe de estudios y profesor de Biología del IES Becerreá.
"Ya no me da tanta vergüenza hablar en público", afirma Anne, que se apuntó a esta liga de debate para superar su miedo escénico. "Creo que es una buena oportunidad para el futuro", dice convencida. Del mismo modo, Alba también tiene la intención de continuar formándose en este ámbito de la oratoria, que sin duda, es un gran ejercicio de documentación y seguridad que solo se puede conseguir con esfuerzo.
El instituto recibió las indicaciones para la fase final dos semanas antes de la última ronda. "No cambiaron el tema a debatir con respecto a la primera fase porque avisaron con poco tiempo de antelación debido a la cuarentena", explica Jesús. "Como llevamos tanto tiempo participando, esperamos hasta el último momento para ver cuáles eran las pautas que nos daban", dice.
Las alumnas reconocen que el debate fue diferente y que el turno de preguntas fue "lo más difícil", ya que es lo que requiere una mayor reciprocidad por parte de los equipos debatientes. "Ao final organizouse bastante ben. Houbo pequenos problemas informáticos pero é normal", sostiene Alba.
El IES de Becerreá es considerado uno de los rivales más fuertes en el Parlamento Xove y es que el instituto lleva participando en torneos de debate desde 2008. Con toda una gran tradición a sus espaldas, el centro becerrego continuará formando parte de estas sesiones parlamentarias. Pase lo que pase, los alumnos seguirán debatiendo.
