La combinación de la nieve acumulada por las precipitaciones de la pasada semana junto a estas últimas jornadas de cielo azul y sol atrajo durante todo este fin de semana a numerosas personas a los puntos más altos de la provincia que, a pesar de las gélidas temperaturas, disfrutaron tanto del paisaje como de la gastronomía de la zona.
Y es que sin ninguna de las restricciones que estuvieron vigentes durante los dos últimos inviernos a causa de la pandemia, A Montaña sigue manteniendo su tirón entre los aficionados a las actividades invernales. Buen ejemplo de ello fue este fin de semana, en el que muchos establecimientos hoteleros y restaurantes de la comarca colgaron el cartel de lleno y bien se puede decir que hicieron su particular agosto en pleno invierno.
Si prácticamente todos los municipios de las zonas altas notaron ese aluvión de visitantes, en pequeños núcleos como O Cebreiro (Pedrafita) o Piornedo (Cervantes) esa concentración de gente fue todavía más evidente.
La cercanía del poblado de O Cebreiro a una vía del alta capacidad, como es la A-6, junto a sus innegables atractivos patrimoniales hacen que este destino sea uno de los favoritos de aquellos que quieren disfrutar de la montaña.
El alcalde de Pedrafita, José Luis Raposo, confirmó que durante esos dos días los accesos al poblado estaban "limpos de neve" y que se circulaba bien, lo que animó a muchas personas a desplazarse hasta allí. La cantidad de coches fue tal que en algún momento Tráfico tuvo que regular la circulación, aunque no se registraron incidentes de importancia.
Esa cantidad de gente hizo que muchas personas tuvieran que desistir de comer en O Cebreiro, ya que todos sus restaurantes estaban a rebosar de público, por lo que muchos tuvieron que desplazarse al mediodía a otras localidades cercanas.
Piornedo es otro de los lugares de A Montaña que en invierno acapara un mayor número de visitantes. Mireia Rodríguez, encargada del hotel que existe en este núcleo, explica que "durante todos los fines de semana del invierno" su establecimiento suele estar completo, pero que este, "de nieve y sol fue perfecto para disfrutar de la zona y hubo mucha más gente de los normal".
"Además, mucha gente que no pudo encontrar alojamiento, vino simplemente a disfrutar de la gastronomía y pasar aquí un día divertido y diferente", explica la responsable de Hotel Piornedo.
Las temperaturas oscilaron el domingo entre los 0 y 9 grados en Lugo capital, mientras que en A Montaña hubo mínimas del entorno de -6 grados en varias zonas. Este lunes la provincia continúa bajo la influencia de las altas presiones y temperaturas en ligero ascenso.
