A Fonsagrada cerró una feria histórica en la que se agotaron las existencias

Los investigadores Antón Santamarina y Pegerto Saavedra recibieron el Butelo de Ouro

Pegerto Saavedra, Argelio Fernández y Antón Santamarina. A.R. (Feira do Butelo de A Fonsagrada)
photo_camera Pegerto Saavedra, Argelio Fernández y Antón Santamarina. A.R.

La XXII Feira do Butelo de A Fonsagrada, que se cerró este domingo, pasará a la historia por haber sido la primera edición que se celebra desde que la Xunta la declarara fiesta de interés turístico de Galicia, pero también será recordada por el éxito de público y ventas que hizo que prácticamente se agotaran las 10 toneladas de butelo que se pusieron este año a la venta.

Pero la satisfacción por las buenas cifras de negocio no era exclusiva de los productores de este y otros manjares cárnicos como chorizos, jamones, lomos u otros derivados del cerdo, sino que también era extensible a los otros sesenta puestos que había instalados en la carpa ferial y que conformaban una variada oferta comercial, con los quesos, el pan, la miel o la artesanía como principales protagonistas.

El sol y las inusuales altas temperaturas de este fin de semana fueron fundamentales para hacer que la edición de este año fuese una de las más concurridas que se recuerdan. De hecho, el gran número de visitantes sorprendió a los propios productores e hizo que durante las dos jornadas la villa registrase un lleno casi absoluto en sus principales calles y en los diferentes locales de hostelería.

BUTELO DE OURO. La ceremonia de entrega del Butelo de Ouro fue el principal acto del programa de ayer. Este año se reconoció con esta distinción al historiador Pegerto Saavedra y al filólogo Antón Santamarina. El acto estuvo presidido por el alcalde de A Fonsagrada, Argelio Fernández, y contó con la asistencia de numerosas personas, entre ellas, el presidente de la Diputación, Darío Campos, y los demás miembros de la corporación municipal, entre otras muchas personalidades.

Visiblemente emocionado, Antón Santamarina dijo no sentirse merecedor de una distinción que, sin embargo, "levarei con orgullo", mientras que Pegerto Saavedra afirmó que esa insignia de oro la tomaba como "un agasallo agarimoso dos meus veciños".

El alcalde de A Fonsagrada, Argelio Fernández, destacó la unanimidad de toda la corporación a la hora de elegir a estos dos estudiosos como los galardonados de este año.

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