
El presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, ha informado este viernes de que la junta de gobierno de la institución provincial ha aprobado, a proposición suya, las alegaciones que presentará al acuerdo plenario del Ayuntamiento leonés de Candín, para cambiar el nombre del municipio, que pasaría a llamarse Ancares.
Tomé explicó a los medios de comunicación que ese cambio de topónimo "vulnera la legislación vigente, carece de fundamentación histórica rigurosa y completa e ignora el hecho incontestable de que Ancares es una amplia realidad geográfica, social, cultural, medioambiental y etnográfica que le da nombre a un territorio en el que se asientan municipios de las provincias de Lugo y León".
Las alegaciones se fundamentan, ha contado, en tres informes técnicos elaborados por los servicios provinciales de Asistencia Xurídica, Económica e Técnica aos Concellos, Medio Ambiente y por el colectivo Patrimonio dos Ancares.
En base a esos informes, la Diputación le solicita "al Ayuntamiento de Candín que archive el expediente para cambiar de nombre el municipio" o que, en todo caso, "incorpore a su topónimo la alusión a su pertenencia a Os Ancares, pasando a denominarse Candín de Ancares".