Xove retoma los funerales tras el error con Rogelia y Conchita y bajar el covid

El párroco ve normalizada la situación, con menos fieles, y sin visitas o misas en la residencia
El panteón de Xuances donde fue enterrada por error Conchita Arias. JM PALEO
photo_camera El panteón de Xuances donde fue enterrada por error Conchita Arias. JM PALEO

A la espera de los trámites burocráticos para exhumar los restos de Cochita Arias del panteón destinado a Rogelia Blanco, en el municipio xovense tratan de recuperar el culto y los funerales bajo las normas sanitarias vigentes en estas celebraciones.

No fueron muchos los oficios religiosos que se suspendieron al haberse disparado los casos de coronavirus hasta porcentajes de récord pero sí se llegó a tomar la decisión de aplazar algunos debido al peligro de contagio y el cierre perimetral del municipio. Uno de esos entierros pospuesto fue precisamente el de Conchita Arias, víctima de la enfermedad y enterrada bajo la identidad de su compañera contagiada. Ambas habían sido trasladadas al centro de Os Gozos en Ourense desde la residencia San Bartolomeu de Xove para ser tratadas allí.

"Agora xa temos normalizado o dos enterros -explica el párroco de Xove, Juan José Novo Gabeiras-, logo desas semanas de acumulación de casos de covid, pero foi unha decisión que tomamos a nivel local, porque as igrexas nunca estiveron pechadas, tal como sucedera na primeira onda da pandemia". Uno de los funerales aplazados, también porque familiares cercanos residen en municipios diferentes, fue precisamente el que correspondía por error a Rogelia Blanco, ahora de vuelta en la residencia tras superar el coronavirus.

El sacerdote local, que también lo es de Celeiro, confirma que en otros entierros sí hubo oficios durante esas complicadas semanas, por deseo de las familias, pero siempre bajo las restricciones a cinco personas máximo en los tanatorios, ninguna en espacios comunes y el tope de 15 asistentes en la conducción y cementerio.

MISAS BAJO MÍNIMOS. La situación es excepcional en estos oficios y las habituales misas por toda la diócesis. Novo reconoce que acuden menos fieles porque muchos son mayores y tienen miedo al virus. "Eu tamén ía pola residencia San Bartolomeu pero agora non se pode e tampouco hai visitas", señala. Entre los párrocos de la diócesis también hubo algún positivo y otros han estado confinados. "Fómonos axudando uns aos outros para manter os oficios", indica Novo Gabeiras.

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