Una notable mejoría en las condiciones de visibilidad ha permitido este martes al mediodía la reapertura al tráfico de la Autovía del Cantábrico -A-8- entre los municipios de Abadín y Mondoñedo, un tramo que estuvo cerrado durante más de diez horas a causa de los densos bancos de niebla que condicionaban la seguridad de los usuarios.
Según informaron a Efe fuentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Lugo, la circulación en ambos sentidos de la marcha quedó restablecida a las 11.50 horas y, posteriormente, el nivel de alerta bajó a "amarillo" al levantar la niebla, de forma que a partir de las 12:29 horas ya se podía transitar "con precaución" por el tramo del Alto do Fiouco.
La niebla obligó a la Dirección General de Tráfico a mantener cerrada la autovía en ambos sentidos de la circulación desde las 01:17 horas, entre los puntos kilométricos 536 y 552, que coinciden con el paso de la A-8 por el Alto do Fiouco, en el municipio de Mondoñedo, donde los problemas con la niebla son habituales.
De hecho, los problemas de visibilidad persisten desde el fin de semana, cuando la autovía estuvo en este tramo más tiempo cerrada que abierta.
El Centro de Gestión de Tráfico del Noroeste realizó pruebas en los últimos días con nuevas balizas en el Alto do Fiouco para reducir las horas en las que esta autovía tiene que permanecer cerrada en ese punto a lo largo del año.
