El pleno de Viveiro aprobó de forma definitiva -con el voto favorable del gobierno, la abstención del BNG y el contrario de PP y Por Viveiro- la ordenanza reguladora del uso de vías municipales para la saca de madera, una vez resueltas las alegaciones de asociaciones profesionales que, entre otras cuestiones, no estaban de acuerdo con el aval bancario mínimo de 50.000 euros que se exigía en el texto inicial. En el definitivo se requiere a las empresas contar con un seguro que debe cubrir "un mínimo de 300.000 euros por sinistro".
Los maderistas deberán inscribirse en un registro municipal para controlar el desarrollo de estas actividades, con todos los datos de la empresa y de la maquinaria que emplea, y donde también se debe entregar la copia del seguro de responsabilidad civil para posibles contingencias. Si la empresa carece de un seguro de estas características entonces se le exige una garantía para la reparación de los daños o perjuicios que pueda ocasionar con su actividad, con una fianza en metálico o aval bancario a favor del Concello con una cuantía de 2 euros por tonelada de madera a extraer, de 2 euros por cada metro lineal de vía municipal con pavimento de tierra o zahorra, y de 4 euros por metro lineal en vías pavimentadas con asfalto, aglomerado o hormigón.
Además será necesario presentar en el Concello una solicitud de autorización tanto para las actividades extractivas de madera como para la retirada de la biomasa, en ambos casos con una antelación de quince días hábiles a la fecha de inicio de los trabajos.
La ordenanza contempla sanciones de hasta 600 euros por infracciones leves, hasta 1.500 euros por las graves y de hasta 3.000 euros por las muy graves.
El texto íntegro se publicará en el BOP y entrará en vigor a los quince días. El gobierno local ve "prioritario" el sector forestal para la economía local y con esta norma busca compatibilizar la actividad con la correcta conservación de los viales "nun concello como Viveiro, con paraxes naturais, montaña e rutas de sendeirismo".
El PP echó en falta que no se tuvieran en cuenta más alegaciones de los profesionales y Por Viveiro no estuvo de acuerdo con la limitación de tonelaje.
