El viento sopla a más de 100 kilómetros por hora en A Mariña

En Viveiro se registró la racha máxima: 125 por hora
Oleaje y viento este sábado en A Mariña. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Oleaje y viento en A Mariña. JOSÉ Mª ÁLVEZ

El viento ha superado los 125 kilómetros por hora en las primeras horas de la mañana de este jueves en el municipio de Viveiro, mientras que las lluvias han dejado más de 51 litros por metro cuadrado en Lousame (A Coruña). 

Según los registros de Meteogalicia hasta las 10,30 horas de este jueves, recogidos por Europa Press, el viento ha dejado rachas de intensidad máxima de 125,1 kilómetros por hora en Viveiro; 107,5 km/h en Vimianzo y 105,5 km/h en Cedeira, en la provincia de A Coruña; mientras que ha alcanzado los 100,9 km/h en Burela y los 100,5 km/h en Foz, en la de Lugo. Hasta las 9,00 horas de este jueves estaba activado el aviso amarillo por rachas de intensidad máxima superiores a los 80 kilómetros por hora en la zona de A Mariña luguesa. 

En la jornada de este miércoles la racha de intensidad máxima correspondió a Viveiro, con 121 kilómetros por hora.

LLUVIA. En cuanto a las precipitaciones, hasta las 10,30 horas se habían acumulado 51,5 litros por metro cuadrado en Lousame; 37 en Val do Dubra; 27,7 en Rois; 26,9 en Santa Comba; y 23,6 en Boiro, todas localidades de la provincia de A Coruña. 

En la jornada del miércoles las precipitaciones han dejado 133 litros por metro cuadrado en Boiro; 111 en Lousame; 100,6 en Abadín (Lugo); 100 en Poio (Pontevedra) y 98,3 en Rois. 

Este jueves el aviso amarillo por precipitaciones se mantiene hasta las 12,00 horas en el suroeste y oeste de la provincia de A Coruña por acumulaciones superiores a los 40 litros por metro cuadrado. 

RIESGO DE INUNDACIONES. La subida de los caudales en ríos de las cuencas de Galicia-Costa mantiene activado este jueves el Plan Especial por Risco de Inundacións (Inungal). En concreto, el mayor riesgo se da en los ríos Xallas, Umia y Verdugo, ante "posibles inundaciones" en sus contornos. 

Por ello, el 112 aconseja retirar vehículos de los márgenes de los ríos, evitar atravesar puentes y torrentes, además de abandonar las actividades en zonas fluviales. 

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