Mondoñedo aprovechó la festividad del Santiago Apóstol en Galicia para celebrar una nueva edición del Mercado das Carmiñas, que incluyó un año más el concurso de ensaladas. Como novedad de este año, la concentración de coches clásicos ha coincidido también con este evento, concentrando en apenas una calle, la realización de cada uno de ellos. La organización y programación de los actos corrió a cargo de la asociación de comerciantes y su presidente, Ángel Marful, destacó que el objetivo en este día es potenciar los productos locales y dar a conocer Mondoñedo.
La Praza da Catedral fue el lugar elegido para la instalación de los 46 puestos de mercado, en los que se podían encontrar distintos productos de huerta, de alimentación o de artesanía. Casi todos los comerciantes locales y provenientes de otras partes de Galicia y de León se ataviaron con vestimenta acorde a la época, bajo la pretensión de recrear como era el mercado mindoniense en el transcurso del siglo XX. Mujeres vestidas con faldas, mandilones y pañueletas, y hombres de chaleco, boina y zocas, fueron los protagonistas de la venta de productos de la tierra y de artesanía. Según destacó Suso García, comerciante del negocio local O Nabiño "la pretensión es involucrar un poco más a la gente y recrear como era el mercado tradicional mindoniense".
La venta no fue el objetivo exclusivo de muchos comerciantes, puesto que la exhibición de productos de artesanía, tales como vestimentas, también tuvieron cabida en la plaza del mercado. A pesar de esto, Suso García destaca que al haber diferentes eventos y un mayor ambiente, la gente se anima más a comprar.
Llegados a este punto, es necesario rememorar este mercado en las primeras ediciones. Como bien destacó la también comerciante local, Susana Redondas, "este mercado en las primeras ediciones quería ser diferente a otros mercados de la comarca y sacar los negocios locales a la calle". Como toda celebración, sufrió una evolución desde sus comienzos, tal y como referenció Redondas: "Cada año hay más gente, principalmente visitantes, y más negocios participantes". Así mismo, para seguir cumpliendo metas y alcanzando mayor reconocimiento, esta comerciante local hizo hincapié en la necesidad de que la gente se vista y colabore, para hacer cada vez más llamativo el mercado.
El ganador del concurso de ensaladas fue Francisco Benítez seguido del bar A Fontevella y del bodegón A Catedral
El concurso de ensaladas dio comienzo a mediodía en la zona de A Fontevella, dónde se exhibieron los productos resultantes de los siete participantes en cuencos de artesanía local mindoniense, elaborados en la alfarería. Entre la diversidad de ingredientes destacaron las frutas y hortalizas de cosecha local. El objetivo, según Marful, se basa en la promoción de las frutas y hortalizas locales, en definitiva "vender Mondoñedo". Este año el número de concursantes prácticamente se duplicó. Los jueces del concurso situaron en un tercer puesto a el bodegón A Catedral, con su ensalada Quen puxo o ovo; segundo puesto para el bar A Fontevella con Cores da Fontevella, y el ganador Francisco Benítez, un particular que participó con Ensalada Viloalle.
En el entorno del seminario, los coches clásicos estuvieron aparcados toda la mañana, luciendo su atractivo clásico y bien conservado. Los juegos tradicionales pensados para los más jóvenes ocuparon gran parte de la tarde. El día estuvo ambientado con ruadas de música tradicional de Souto Ximaro.
