Los trabajadores de la fábrica de aerogeneradores que la multinacional Vestas tiene en Chavín, en el municipio de Viveiro, buscan la complicidad de las administraciones locales de A Mariña para luchar por sus puestos de trabajo, después de que la compañía anunciase el cierre de la factoría, en la que trabajan 115 personas, para finales del presente año.
Este viernes -día 24 de septiembre-, representantes del comité de empresa se reunirán con la alcaldesa y la corporación municipal de Viveiro, así como con otros alcaldes de la comarca, para buscar el apoyo de los ayuntamientos mariñanos en el conflicto laboral planteado por el anuncio del cese de actividad de la fábrica.
Ver más: La patronal eólica gallega califica de "pésima noticia" el cierre de Vestas
Asimismo, el comité de empresa ha convocado para este sábado, día 25 de septiembre, una concentración en la Praza do Concello de esa localidad mariñana para expresar su rechazo al anunciado cierre de la factoría y reclamar una “solución” que permita mantener los empleos.
El presidente del comité, David Mariño, confirmó que esa concentración comenzará a las 12.00 horas, así como que han sido convocados a la misma todos los trabajadores.
“Espero que se trate de un acto de fraternidad, de familias y amigos de los trabajadores de Vestas, como una muestra de lo que nos une y de lo orgullosos que estamos de nuestro trabajo y de nuestra comarca”, dijo Mariño a los medios de comunicación.
Ver más: La Xunta exige "implicación" al Gobierno para "revertir" el cierre de Vestas
Además, confirmó que la plantilla seguirá concentrándose a diario, a las 10.30 horas, ante las puertas de la fábrica, durante el tiempo de descanso.
CONDE RECIBIRÁ AL COMITÉ. El vicepresidente económico de la Xunta, Francisco Conde, recibirá al comité de empresa de Vestas el próximo lunes 27 de septiembre a las 14.00 horas en la delegación territorial de la Xunta en Lugo.
El también conselleiro de Economía ha reclamado "implicación" al Gobierno central, mientras que los partidos de la oposición en Galicia, BNG y PSOE, demandan "alternativas" al Ejecutivo gallego, por sus competencias en política industrial.
