En la mañana de este martes quedaba suspendido el juicio que iba a celebrarse en la Audiencia Provincial de Lugo contra un hombre acusado de arremeter contra los testigos presenciales que le reprocharon su actitud ante una supuesta agresión machista en plenas fiestas de Celeiro (Viveiro), por la que se está siguiendo un proceso diferente en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Gijón.
Fuentes jurídicas informaron a EFE de que aún no se ha señalado nueva fecha para la vista por los hechos que sucedieron el 24 de julio de 2016, sobre las cinco de la madrugada, cuando se produjo una "gruesa discusión" entre el acusado y su pareja, que acabó con una supuesta agresión a la mujer.
Al reprocharle varios testigos su comportamiento, el hombre se enfrentó a ellos y, antes de que consiguieran reducirlo, supuestamente lesionó a tres personas, entre ellas al camarero y a un cliente de uno de los bares de la fiesta.
Según el escrito de acusación del ministerio fiscal, el cliente se llevó la peor parte, porque se cayó al suelo y se golpeó la cara contra un bordillo, motivo por el cual perdió una pieza dental.
Posteriormente, una vez practicada la correspondiente detención, el supuesto agresor fue trasladado al PAC de Viveiro para ser asistido de sus propias lesiones, pero allí se mostró "violento y agresivo", además de insultar gravemente a la doctora que se ocupó de atenderlo, a la que le llamó "puta, colombiana, asquerosa, gorda, foca" o "panchita de mierda".
El fiscal considera que estos hechos son constitutivos de un delito de lesiones, otros dos de lesiones leves y uno más de atentado -o alternativamente de injurias, con la agravante de motivación racista y sexista-, por lo que pide para el acusado seis años de cárcel y una multa de 1.080 euros, además de las correspondientes indemnizaciones a las personas lesionadas.
