Suso Rey (Foz, 1970) ha emigrado a Indonesia para continuar con su trayectoria como entrenador de fútbol sala. Ha fichado por el Bintang Timur Surabaya, el actual campeón de la Liga indonesia, que comienza en enero y terminará en agosto.
"Estoy muy contento, la adaptación está siendo fácil, el club es muy hospitalario", dice Rey, que reconoce que "la primera semana se te hace complicada, sobre todo los dos primeros días donde se te pasan muchas cosas por la cabeza", asegura.
Suso vive en Surabaya, en la isla de Hava, en una ciudad de diez millones de habitantes. Llegó al Bintang para sustituir a Héctor Couto, con el que había entrenado en el O Parrulo Ferrol. "Él se volvió a España. Habló conmigo de esta opción y con el club, ya que partimos de la misma escuela, de Bruno García, y conmigo sabían que íbamos a seguir la misma metodología, y el acuerdo se hizo en un par de semana", explica. ¿Te costó? "Sí, porque yo estaba cómodo, trabajaba en el Activity, de preparador físico en el Viveiro y llevaba algún equipo de inferiores de baloncesto, pero fue mi mujer la primera que me apoyó y me dijo que aprovechase esta oportunidad", argumenta.
Fue mi mujer la que más me apoyó para que aprovechase esta oportunidad
Suso se maneja en inglés, y tiene un traductor que le apoya en los entrenamientos para traducir sus consignas al indonesio. "La mejor forma de hablar un idioma es verte en la necesidad de hacerlo; al principio me costó un poco el inglés, porque piensas en español, pero poco a poco me fui soltando", subraya.
El técnico lleva solo algo más de un mes en Surabaya, y prácticamente no ha conocido la ciudad. "Voy del pabellón a casa y de casa al pabellón", dice. "Cuando hacemos doble sesión ya me quedo todo el día allí trabajando", explica. "Enfrente de casa tengo un centro comercial que es donde voy a tomar café", apunta.
Suso cuenta con un chófer que le va a buscar a casa y le lleva al pabellón todos los días. "Aquí amanece todos los días a las 04.30 horas y anochece a las 17.30 horas, ni crecen ni menguan los días", explica. Los fines de semana, por ahora, los ha tenido libres, pero a partir de éste ya empieza con los partidos amistosos.
Uno de los puntos que le hizo decidirse a fichar por el Bintang es la presencia de David Ferreiro como preparador físico, que ya estuvo el curso pasado con Héctor Souto. "Para mí fue muy importante que David estuviera aquí, para no sentirme solo", dice. "Él no tiene problemas, cuando tiene un fin de semana libre se va por ahí", señala.
Piensas que vienes a un país muy distinto al nuestro y aquí están muy occidentalizados
Otro de los cambios básicos al que uno se tiene que adaptar cuando cambia de país, continente y cultura es a la comida. "Lo llevo bien, pero es verdad que utilizan mucho picante y especias, y hay que medirse", comenta. "De todas formas piensas que vienes a un país muy distintos a Occidente y no es así, están muy occidentalizados, hay mucho comercio, ellos viven en la calle y en muchas cosas están por delante nuestro", dice. ¿En qué? "Por ejemplo, en el tema tecnológico aquí todo funciona por el móvil, desde que te laven la ropa, hasta la comida o cualquier cosa, está todo muy informatizado", advierte. "Sinceramente, creía que venía a otra historia", se sincera Suso sobre Indonesia, el cuarto país más poblado del mundo y donde la mayoría es de religión musulmana, por lo que se para la Liga entre marzo y mayo por el Ramadán.
Suso sabe que a finales de marzo o a principios de abril volverá a Foz para estar algo más de un mes con su familia. "Cuando estuve en Italia era todo más fácil, estás a dos horas, pero ahora para venir aquí o irte necesitas dos días", concluye.
