Cuando el piragüismo mezcla la aventura y la competición ahí suele estar Rodrigo Navarro. El palista del CP Viveiro Urban Hotel es ya todo un clásico de algunas de las pruebas más particulares que se celebran en diferentes puntos del mundo y acaba de regresar de la Regata del Río Negro, la competición por etapas más larga del mundo, con 277 kilometros.
La prueba, que cruza buena parte de la Patagonia argentina, entre las ciudades de Neuquén y Viedma, reúne a un gran número de palistas, distribuidos en categorías. Navarro fue uno de ellos, participando en el K2 Máster A compartiendo responsabilidad en el barco con el piragüista argentino Emanuel Carnicero, del club de canotaje La Pobrecita.
Tras el éxito alcanzado en 2019, donde fueron segundos, en esta ocasión se quedaron a punto de subir al podio, ocupando la cuarta, con un tiempo total de 15 horas y 44 segundos.
Pese a no repetir como medallista, Navarro se mostró muy satisfecho con la experiencia e incluso con el rendimiento, ya que además "este tipo de pruebas son la mejor preparación posible en la pretemporada de cara al campeonato gallego de invierno, que es el principal objetivo".
Para seguir con esta preparación, el palista vivariense se desplazará a las Islas Canarias para tomar parte en otra de las pruebas que lleva ya años haciendo: la Ocean SurfSki Lanzarote World Cup, donde también se reúnen grandes especialistas mundiales nacionales e internacionales.
