Los belenes son un plato tradicional de los no comestibles que en estas fechas se convierten en indispensables. No solo en nuestros hogares, sino en nuestras calles y, de unos años a esta parte, en diferentes rincones y locales de todos nuestros pueblos.
Ribadeo no es una excepción y desde hace ya años en la Venerable Orden Tercera organizan uno que arrastra ya una tradición importante, montado por Juan Estévez y que este año contó con una bendición especial. Ubicado en la calle Reynante cuenta con un gran número de visitantes en parte por su encanto, en parte por su tradición y en parte por su excelente ubicación.
Pero además en la villa ribadense funciona la denominada Agrupación Belenista, en la que cada año se organizan para montar unos belenes espectaculares que además van variando con el paso de los tiempos. La idea es cambiarlos cada dos años.
Este año son dos los locales que ocupan. Uno se encuentra en la denominada Praza da Fontenova, junto al pub Cienfuegos, donde está el denominado "Florentino", donde se reproducen edificaciones y motivos de dicho estilo.
El otro es mucho más local. Se encuentra en la calle Villafranca del Bierzo, en la antigua Casa Maseda, y en una de sus partes se pueden ver distintas capillas que se encuentran junto al Camino de Santiago a su paso por el municipio de Ribadeo como por ejemplo la de la Virgen del Camino, la de San Vicente de Cubelas, la de Nosa Señora das Virtudes de Arante, la de Vilela, e incluso el pazo de Cedofeita.
Por otra parte es posible alejarse un poco hasta un enclave particularmente interesante del Camino Norte en A Mariña, como es Mondoñedo. Se reproducen rincones como las terrazas de la Praza da Catedral o varias de sus iglesias. También se puede ver el monasterio de Vilanova de Lourenzá.
Sus organizadores reconocen que están teniendo un gran éxito de gente tanto en uno como en otro y que el flujo de visitantes es continuo hasta el punto de que a veces incluso tienen dificultades para cerrar por la gente que hay.
