Un importante reguero de sangre, que a primera hora de la mañana de este viernes aún era visible, desde la Praza do Concello de Burela hasta la Praza do Mariñeiro de la localidad, despertó entre los vecinos todo tipo de especulaciones, que fueron creciendo como la espuma al ser además un día de mercado en la villa, lo que congrega a numerosas personas en la localidad.
Una situación que se vio además acrecentada por el hecho de que las fuerzas de seguridad colocaran una cinta en las inmediaciones de la Praza do Mariñeiro, junto a la parada de taxis de la villa, de las que habitualmente se utilizan para impedir el paso de personas ajenas en determinadas escenas y preservar las mismas. Eso hizo que los comentarios de los vecinos llegaran a hablar de una posible pelea e incluso de un apuñalamiento.
Pero las múltiples versiones quedaron desmentidas conforme avanzaba la jornada y todo parece indicar que la sangre corresponde con la perdida por una persona que pudo sufrir una aparatosa caída en el entorno del centro de la villa y que pudo desplazarse hasta el hospital por sus propios medios, ya que no fue trasladado por ninguna ambulancia.
Algunas fuentes hablan de un varón de mediana edad que sufrió contusiones por una fuerte caída durante la madrugada del jueves al viernes, lo que le provocó heridas en distintas partes del cuerpo, entre ellas en la mandíbula, lo que puede explicar la abundancia de sangre.
FALSA ALARMA. Los bomberos de Barreiros y Protección Civil de Foz salieron en la tarde de este viernes, pasadas las siete de la tarde, para una intervención por un supuesto incendio en una cabeza tractora en un vial del municipio focense, que al final resultó ser una falsa alarma.
