¿Qué fue de... José López, 'Castrín'?

Asegura que trató de llevar la política sin hacer daño a nadie y se reconoce como "moi pedigüeño" para conseguir cosas que Riotorto necesitaba 
José López, 'Castrín'. EP
photo_camera José López, 'Castrín'. EP

No pasa un día sin que José López Cabodevila, al que todo el mundo sigue conociendo por Castrín, lea el periódico. Tiene noventa años y el vicio metido en el cuerpo. A diario lo recibe en su casa de Muxueira, pero los fines de semana y festivos enseguida se preocupa de que se lo vayan a buscar porque le sigue gustando estar al tanto de todo lo que sale en la prensa, aunque ahora ya no salga ella. Lo hizo durante medio siglo, que fue el tiempo que estuvo en la corporación municipal de Riotorto, pero sobre todo los 24 años que estuvo como alcalde hasta que lo apartó del cargo un tripartito al que se refiere como fruto de "unhos tempos convulsos". Con noventa años y con el Canal 24 Horas de noticias siempre a su lado, asegura que sin ninguna duda volvería a repetir una experiencia en la política en la que, asegura, "tentei non facerlle nunca daño a naide".

Logro: convirtió a Riotorto en el primer municipio de Galicia que contó con concentración en todo su territorio

Esa reivindicación de su pasado político la hace ahora, pero cuando echa la vista atrás recuerda que él nunca quiso entrar en política "porque eu tiña os meus negocios e moito traballo. Adicábame á madeira, ó leite, creamos a empresa O Mazo... Eran moitas cousas e eu non quería entrar, así que aínda que contactaron moito comigo eu entrei como concelleiro e así botei moitos anos". Lo que pasó es que después se fueron yendo unos y otros hasta que prácticamente no le quedó otra que presentarse a una alcaldía en la que llegó a convertirse en el alcalde más veterano de la provincia de Lugo revalidando una mayoría absoluta tras otra y perdiéndola solo por un puñado de votos: "Tres me faltaron, pero non chegaron e perdín". Lo cuenta sin acritud y de su salida de la alcaldía tampoco se le nota afectado: "Había que deixalo e punto, non lle din moitas voltas, porque eu tiña os meus negocios, había que atendelos e xa botara moitos anos. Pasouse o disgusto daquel día".

José López, 'Castrín'. EP
José López, 'Castrín'. EP

Pero una trayectoria tan amplia al frente de un municipio da para muchas cosas. Cuenta que "cando cheguei non había practicamente de nada en Riotorto, así que tiven que ir pedindo para ter as cousas máis básicas: a auga, a luz, as estradas... Porque todo eran camiños. Para chegar á miña casa había unha corredoira malísima. Estaba todo por facer". Así que se puso a ello y cuenta que "iba á Xunta dúas veces ó mes ou así, pero na Diputación estaba seguido, porque sempre tiña cousas que pedirlles". Y añade con cierto orgullo que aunque le decían que era un alcalde muy pedigüeño "tamén me contaban que a min daba gusto darme os cartos porque vían que os usaba nas cousas para as que tiñan que usarse, non como se facía noutros sitios, que llos daban e non pasaba iso. E eu, a verdade, sempre tiña moito en que metelos".

Cuenta también orgulloso cómo convirtió a Riotorto en el primer municipio en tener completa la concentración parcelaria, algo que fue una auténtica rareza: "Fíxeno porque vin enseguida que facía moitísima falla. Aquí había leiras pequenísimas e non había forma de facer nada ao xeito, así que nos metimos coa concentración e saqueina adiante, e eso que costou moitísimo traballo". Aquello le valió el aprecio de una persona tan exigente como Manuel Fraga, con quien tuvo relación "e ata veu a unha comida que fixemos aquí na que estiveron os alcaldes de todo por aquí e un montón de autoridades". Era su época, por la que da las gracias "ós veciños, que me votaron e a verdade é que sempre colaboraron comigo moito. Leveime con todos e axudáronme moito". 

Currículum
Medio siglo se tiró José López Cabodevila, al que todos conocen como Castrín, en la corporación de Riotorto. De ellos, 24 años como alcalde que completan una experiencia que repetiría sin pensar. Ahora, con noventa años, mira atrás y cree que algo hizo por un concello donde "non había nada".

Más en A Mariña
Comentarios