La residencia de mayores de Trabada celebró este sábado su primer cumpleaños. Lo hizo con 26 plazas cubiertas y con el ánimo muy reforzado: hace solo unos días que les comunicaron que los residentes y las trabajadoras están libres del Covid-19, algo que estos días es siempre un motivo de alegría. Para celebrar este primer aniversario el centro que dirige Silvia Murias acogió algunas actividades y todos recibieron distintas felicitaciones, aunque tuvieron que ser online debido a las restricciones que impone la cuarentena.
El presidente de la Diputación, José Tomé, fue uno de los que quiso sumarse especialmente a esas felicitaciones precisamente como responsable de la institución que impulsó su puesta en marcha algo en lo que resultó decisiva la alcaldesa, la socialista Mayra García. Tomé lamentó la distancia impuesta por la situación pero también reseñó la circunstancia de que todas hubiesen dado negativo en las pruebas del coronavirus, "proba de que estádelo facendo moi ben, pero isto non nos pode permitir baixar a garda, senón que ten que servir para coller máis folgos e forza para seguir sendo disciplinados e cumprindo cos protocolos como ata o de agora".
Mayra García no faltó tampoco en las felicitaciones al centro por su funcionamiento y el trabajo que desarrollan allí sus profesionales.
Hubo también sitio para que pudieran escuchar una actuación de la cantante Pili Pampín, que les dedicó una canción.
Por la mañana hubo una actividad que fue la denominada Pegadas no Camiño. Los residentes imprimeron ilustraciones con forma de huella en las que escribieron sus nombres y los de todas las personas con las que convivieron a lo largo de los últimos 365 días. Después jugaron un bingo especial diseñado por el personal del centro.
Para comer, se sirvió un menú especial compuesto por un cocido completo y flan casero. Por la tarde, el cuadro de personal al completo acudió al centro para acompañar a los residentes en una merienda en una fiesta especial que el presidente provincial quiso que subrayase "unha xornada moi especial".
Jornada de muy buenas noticias la de este sábado para las residencias de la comarca de A Mariña. Todas las analíticas realizadas en la residencia de mayores de Ribadeo resultaron ser negativas y tanto trabajadores como residentes están libres del virus, algo de lo que se felicitaron tanto desde el Concello como desde la Diputación Provincial.
Además, en Foz recuperaron la normalidad al superar el periodo de cuarentena las personas que tenían que habían dado positivo, lo que supuso un alivio también para toda la comunidad involucrada en su funcionamiento ya que pueden continuar con su trabajo extremando las medidas de precaución pero sin la incertidumbre anterior. También hubo buenas noticias en Viveiro, donde en la residencia Betania recibió el alta un usuario y ya solo queda otro afectado.
La concejala ribadense de servizos sociais, Mónica Freire, reonoció "o esforzo que se está a facer tanto por parte da Deputación como polo propio Concello nas labores de prevención e desinfección das instalacións, tanto na súa parte interna como externa e que se seguirán facendo mentres dure esta situación de alarma".
El presidente provincial coincidió en que "estes resultados son froito do rigoroso traballo que se está a levar a cabo nos centros de atención a maiores dende finais de febreiro, extremando as precaucións e medidas de seguridade", algo que anticipa que será necesario continuar haciendo para intentar evitar sobresaltos.
O Valadouro confirma que tampoco tiene positivos
Una de las usuarias de la residencia de la tercera edad de O Valadouro, que dio positivo en Covid 19 en un test rápido de los que se realizan en el Hospital da Mariña a donde acude a someterse a diálisis, dio negativo en la segunda prueba, por lo que tras este PCR, el centro de Ferreira se sigue manteniendo sin positivos, según confirman desde la Fundación San Rosendo, de quien depende el centro y desde donde insisten en mandar un mensaje de tranquilidad a las familias, que llevan más de un mes sin ver a los internos.
