El llamado veranillo de San Miguel ha entrado con fuerza en Galicia, dejando temperaturas de hasta 31 grados en puntos como Ourense o Ribas de Sil. El fenómeno se ha notado también en la costa lucense, que el pasado domingo registraba una de las máximas más altas de la comunidad: 28,1 grados en Viveiro.
En condiciones normales de un día estival en la comarca apenas se superan los 20 grados y el veranillo ha provocado un vuelco en los mercurios. Ante este panorama las playas mariñanas se volvieron a llenar este lunes de bañistas que disfrutaron del sol, que calentó a 25 grados en los arenales de Viveiro y a 23 grados en los de Burela y Barreiros. En la ciudad de Lugo también apretó el calor y los termómetros registraron 28 grados.
El veranillo ha llegado para quedarse a la comunidad, y aunque durará menos de diez días, dejará valores de 30 grados en puntos de Monforte y zonas del interior de la comunidad.
Así, el tiempo será estable en la mayor parte de España con máximas que experimentarán un "ascenso progresivo", sobre todo a partir del jueves, con valores más altos de lo habitual para la época del año, superando los 30 grados e incluso los 32 o 34 en algunos puntos.
El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, indicó este lunes que esta situación anticiclónica favorecerá que el veranillo de San Miguel, un período breve de bonanza en el tiempo que suele darse alrededor del día 29 de septiembre, llegue un año más puntual a su cita.
Sin embargo, según el portavoz de Aemet, las madrugadas todavía serán frescas en áreas de la meseta norte y páramos del centro, donde se rondarán los 10 grados a primeras horas de la mañana.
El tiempo estable persistirá, aunque mañana un frente rozará Galicia con lluvias débiles, mientras que en el resto, lo más destacado serán bancos de niebla matinales y el viento que soplará del suroeste y que propiciará un ascenso claro de las temperaturas en el Cantábrico Oriental, donde se podrían alcanzar o superar los 30 grados.
Durante la segunda mitad de la semana, los mercurios continuarán ascendiendo "de forma ligera, pero progresiva", favoreciendo "un ambiente muy cálido para la época del año en la mayor parte del país", sobre todo en el interior peninsular en las horas centrales del día, con máximas que estarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal. A partir del jueves, se superarán los 25 grados en el nordeste, 30 grados en la mitad sur y 32-34 grados en el valle del Guadalquivir en un periodo habrá una ausencia casi total de precipitaciones.
Del Campo adelantó que en la recta final de la semana se puede "configurar" un episodio de altas temperaturas debido a la estabilidad atmosférica propiciada por una dorsal que garantiza cielos poco nubosos, sin mezcla de masas de aire, y en la que el sol calentará la superficie.