La asociación folclórica focense O Feitizo celebra el 40 aniversario de su formación. Una efeméride que conmemorará con varios actos, que comenzaron este martes con la apertura de una exposición de muñecas vestidas con el traje regional realizadas por la vicepresidenta de la entidad, Pilar Arias, que el próximo día 30 cumple 50 años, de los que lleva treinta como profesora de baile del grupo.
La muestra, que puede visitarse en el Cenima, reúne 33 muñecas, todas de porcelana y tres Mariquita Pérez, ataviadas con variedades de trajes, de gala y faena, realizados a imagen y semejanza de los de las personas que los lucieron y es que la particularidad de la exposición es que todos los atuendos son una réplica, pues Pilar además de profesora de baile es costurera y ha hecho trajes para muchos componentes.
Así, buena parte de las muñecas tienen el nombre de la persona en la que están inspiradas, comenzando por Sara, la hija de Pilar, con la que empezó la colección. "Ás poucas que non teñen nome chámoslles Piluchiñas, que é como me chamaban a min na casa, porque son a sétima de oito irmáns", cuenta la artista sobre una afición que nunca pensó que saldría de su casa, pero que ya ha estado en diversos lugares.
En todos los sitios llama la atención la cantidad de complementos que lucen las modelos, pues cuentan con el traje completo, enaguas, medias, pololos y hasta zocas en algún caso. "É máis difícil facer o traxe en pequeno que a tamaño natural", cuenta, mientras recuerda que las más complicadas de vestir fueron las más pequeñas, del tamaño de un mechero, a lo que suma la complejidad de la rigidez de las muñecas a la hora de vestirlas.
La muestra se completará con otras actividades, entre las que figuran la sardiñada de San Juan o la fiesta ibicenca de agosto, en este caso con el grupo de batuka creado hace una docena de años y que forma parte de la entidad, que a mediados de agosto tiene su festival en la villa, que este año será especial, ya que se pretende reunir a gente que estuvo en la formación a lo largo de su historia, como también sucederá con la cena, que reservan para después del verano.
