Noemi Balada: "La ciudadanía está angustiada, la guerra provoca impotencia"

Nacida en Barcelona, esta psicóloga ejerció su profesión en Madrid durante años antes de llegar a Barreiros, de donde es parte de su familia. Reconoce que ha notado tanto ella como sus colegas un incremento de la demanda de sus servicios por las distintas crisis que estamos viviendo
Noemi Balada Pérez, psicóloga. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Noemi Balada Pérez, psicóloga. JOSÉ Mª ÁLVEZ

ESTE TREN de penalidades mundiales que nos acecha en los dos últimos años nos acerca a hablar con la psicóloga Noemi Balada Pérez (Barcelona, 1975), que ejerce en A Mariña, más concretamente en Ribadeo, desde 2016, tras pasar años trabajando en Madrid.

Empecemos por una cuestión personal. Tengo una hija de diez años. ¿Le explico lo que pasa en Ucrania? ¿Cómo lo hago?
Sin ser una experta en el trato con niños, a ellos hay que explicarles las noticias malas sin dramatizar en un lenguaje que ellos entiendan. Que hay gente que está enfadada, pero que los adultos los vamos a proteger. Hay que explicarlo, no ocultarlo.

¿Se debe hacer también en los colegios?
En los colegios se hace de manera más general, pero la parte importante debe ser de los padres. En un colegio se lo explican al grupo y cada uno lo capta a su manera, depende de si es más sensible, más maduro.

La pandemia, el volcán de La Palma, la invasión a Ucrania... ¿Estamos en el peor momento desde hace décadas?
Yo creo que no. Creíamos que estábamos con la situación controlada, que no nos iba a volver a afectar una guerra, un virus, y tenemos que pensar que nuestra especie es una más, que nos podemos ir y que hay cosas que nos pueden afectar a todos. Ha habido otras épocas de igual o menos bienestar y menos recursos.

¿Ha notado usted y sus colegas un incremento de la demanda de la psicología?
Sin lugar a dudas. Y donde más lo he notado ha sido en la sexta ola. Hay mucha demanda. La gente necesita que les gestiones el malestar que todo esto está produciendo. No tenemos sensación de control. Estamos muy exigidos los psicólogos.

¿Estás más angustiada la gente que se encuentra en su consulta?
Depende de dónde parta cada uno. Si una persona parte de un siete, baja un poco, pero si parte de un tres, está en mayor riesgo. Con la pandemia la gente estaba más deprimida, baja de ánimo, no podía hacer cosas. La gente ahora está más ansiosa, más angustiada. La guerra genera impotencia. Para la gente con una vida más plena y más recursos el choque es menor, pero para aquellos que tienen problemas económicos...

Al inicio de la pandemia había más depresión, ahora la gente acude más por ansiedad

¿Le preocupa que la subida de precios impida a gente que lo necesita ir al psicólogo?
Sí, porque si además espera a que le atiendan en la Seguridad Social... La gente está muy preocupada por los problemas económicos y ahora, con estas subidas, se preguntan si van a poder mantener lo que tienen, si les van a limitar a viajar. Puede volver la depresión.

¿Le ha sorprendido la edad de la gente que acude a su consulta?
Igual al principio de la pandemia hubo más gente joven, con el problema de que no se podía relacionar, gente desorientada y desmotivada. Ahora yo creo que es un poco general y cuanto más mayores, más nos va a preocupar el dinero y el futuro.

¿Es muy distinto trabajar en una gran ciudad que en un pueblo?
Sí, hay diferencia, es un perfil distinto de gente. Aquí se ven muchos más problemas familiares por el estilo de familia, y en una ciudad son más problemas laborales y de pareja.

¿Ya no se ve lo de ir al psicólogo como algo negativo?
Totalmente. Antes no lo contaban ni a su propia familia y ahora a los jóvenes incluso les gusta decirlo. Se ha normalizado. Es un signo de salud mental, de crecimiento, de autoconocimiento que se ve como positivo. Se está transformando en algo positivo.

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