La reunión para buscar una solución definitiva para la fábrica de Aluminio de Alcoa en San Cibrao duró largas horas este lunes en Santiago y se reanuda este martes para tratar de avanzar en las posturas. Siguen muy alejadas en el punto crítico de la parada de la producción durante dos años que pide la aluminera y que los sindicatos rechazan, aunque hubo avances en la cobertura a las auxiliares al comprometerse Alcoa a extender sus contratos durante tres años.
En concreto la multinacional se muestra "dispuesta a extender por un periodo de tres años los contratos actuales directamente afectados por el cese temporal de la actividad de electrolisis y de la planta de ánodos" que pretende llevar a cabo en 2022 y 2023. Además propuso a los sindicatos los términos de un nuevo convenio colectivo con una vigencia hasta el 31 de diciembre de 2025 y avanzó que está trabajando en la contratación de suministro de energía a partir del 2024.
En cuanto a las inversiones, la empresa añadió en la reunión de este lunes que había comprometido la dotación necesaria para reemplazar uno de los hornos de homogeneizado, lo que conllevaría "un aumento de la capacidad de producción de tocho en fundición", y ofreció la posibilidad de depositar o avalar los fondos necesarios para las inversiones, algo que le demandaban sindicatos y administraciones. En la anterior reunión había confirmado mejoras en el horno de cocción de ánodos y en la subestación principal, además de para asumir el coste del rearranque del 100% de la producción de aluminio primario en 2024.
Todo ello, siempre y cuando "se proceda de forma urgente a un cese temporal de la electrolisis y de la planta de ánodos", dice Alcoa, que reitera su voluntad de avanzar en las conversaciones para "lograr urgentemente un acuerdo".
La reunión terminó con la empresa pendiente de estudiar la última propuesta de los sindicatos y se reanuda este martes a las diez en el mismo lugar
Según el presidente del comité, José Antonio Zan, la reunión de este lunes giró en gran parte en torno a la demanda a Alcoa de "avales y garantías" de sus intenciones para hacer la fábrica competitiva, pues lamenta que después de tanto tiempo intentando cerrarla "la confianza es casi nula". "Nos basamos única y exclusivamente en solicitar garantías y avales para el rearranque de la producción al 100% en 2024, que actualmente está al 85%, aparte de qué plan industrial y energético tenemos encima de la mesa", dijo Zan.
En cuanto al energético, apuntó que Alcoa habla de "ocho posibles empresas" que podrían proporcionar un acuerdo de suministro de electricidad competitivo. Y sobre las inversiones, al comité las anunciadas le siguen pareciendo insuficientes: "Estamos hablando de avales sobre inversiones que nosotros cuantificamos muy altas y que la empresa todavía no ha llegado a ellas, ya que nosotros hablamos de un plan de viabilidad de 200.000 amperios para que la empresa sea competitiva el día de mañana con el resto", defiende.
El sindicalista valoró el avance en el blindaje que demandaban para el resto de empresas dependientes de la fábrica: "Lo más importante para nosotros es que las empresas de suministros y de transporte van a ser prioritarias a la hora de obtención de contratos, mientras que las auxiliares tendrían contratos durante tres años, pero también queremos introducir una cláusula para que no se pueda aplicar ningún Erte ni Ere en ellas en esos tres años", dice.
La reunión terminó con la empresa pendiente de estudiar la última propuesta de los sindicatos y se reanuda este martes a las diez en el mismo lugar, también con participación de Gobierno y Xunta. A la de este lunes acudieron el jefe de gabinete de la ministra de Industria, Juan Ignacio Díaz; la subdelegada del Gobierno, Isabel Rodríguez, o la directora xeral de Planificación Enerxética, Paula Uría.
