Muere un zifio de Sowerby que varó vivo en Xove tras intentar reintroducirlo en la mar

Protección Civil y la Cemma acompañaron al cetáceo que llegó a la playa de Lago sin fuerzas y delgado ► Mide casi cuatro metros de longitud y es un macho joven, según los especialistas, que este jueves le harán la necropsia en Morás
photo_camera El equipo de apoyo de la Cemma y Protección Civil de Xove trataron de recuperar el zifio. JOSÉ Mª ÁLVEZ

Un equipo de especialistas del Ministerio de Medio Ambiente que apoya a la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (Cemma) de Galicia junto a Protección Civil de Xove intentaron este miércoles en vano reintroducir en el mar un ejemplar de zifio de Sowerby o del Atlántico norte —Mesoplodon bidens— que varó vivo hacia las once y media de la mañana de este miércoles en la playa de Lago (Xove), donde acabó por morir a última hora de la tarde. 

El equipo de apoyo de la Cemma y Protección Civil de Xove trataron de recuperar el zifio. JOSÉ Mª ÁLVEZ
El equipo de apoyo de la Cemma y Protección Civil de Xove trataron de recuperar el zifio. JOSÉ Mª ÁLVEZ

El cetáceo, un macho de casi cuatro metros de longitud y entre 800 y 1.000 kilos de peso, se encontraba delgado y sin fuerzas, por lo que cada vez que intentaban llevarlo mar adentro regresaba hacia tierra. Creen que es un ejemplar juvenil. El coordinador de varamientos de la Cemma, Alfredo López, indicaba que "non tiña posibilidades de supervivencia. Un cetáceo que non nada, morre afogado, polo que achégase á praia para pousar o corpo e respirar por última vez". "Intentouse, pero foi imposible", confirma el responsable de Protección Civil xovense. Luis Bernardo Insua.

El mamífero quedó depositado y tapado en la explanada del puerto de Morás, donde lo dejó la pala municipal, hasta que este jueves los especialistas de la Cemma le puedan realizar la necropsia para determinar las causas de su muerte. Esto resulta de gran interés, dado que desde 1990 solo hay cinco registros de zifios entre los 8.000 varamientos registrados en Galicia, indica López. 

Un vecino que paseaba por el arenal alertó de su presencia a las once y media de la mañana, Protección Civil acudió dos horas después al recibir el aviso de la Cemma y siguió sus instrucciones. Este zifio habita a una profundidad entre 200 y 1.500 metros, donde caza peces pequeños y cefalópodos como los calamares.

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