La mesa de seguimiento de Alcoa, en la que participa la empresa, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, sindicatos y gobiernos regionales, tiene previsto reunirse el próximo 6 de mayo después de que el Ejecutivo no pudiese sacar adelante el estatuto para los consumidores electrointensivos. En este contexto, desde Alcoa reconocen que contar o no con un marco estable que permita un precio eléctrico competitivo puede condicionar el futuro de la industria del aluminio primario, así como el interés de posibles inversores.
Según opinó el pasado viernes la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, la no aprobación del estatuto para los grandes consumidores de energía en el Consejo de Ministros previo a las elecciones generales de este domingo "no tenía por qué afectar" al proceso de venta de las plantas de Alcoa en Avilés y A Coruña. Está previsto que a finales del mes de mayo se presenten las ofertas vinculantes por ambas plantas. Hasta el momento, y según señalaron recientemente fuentes conocedoras del proceso, seis grupos habían mostrado su interés por las fábricas de la multinacional alumínica: Cunext, Liberty House, BCT Metals, Sherpa, Atlas Holding y Quantum.
Todo ello con la vista puesta en el 30 de junio, el plazo que Alcoa y los sindicatos acordaron en enero para mantener los empleos de estas plantas mientras se buscaba un comprador interesado.
El Ejecutivo quiere reunirse próximamente con patronales de sectores que representan a empresas con un alto consumo
Alcoa ha insistido en señalar que la industria del aluminio primario necesita un marco energético que permita costes competitivos y certidumbre en línea con lo que ocurre en países de nuestro entorno. De hecho, ha señalado que el coste eléctrico supone el 40% de los costes totales y es además un 50% superior al que soportan otros países de nuestro entorno.
Por ello, ha reclamado los mecanismos que sean necesarios para garantizar un marco estable que permita la competitividad de esta industria. Tras no aprobarse el estatuto para los electrointensivos y para abordar la situación de la industria, el Ejecutivo quiere reunirse próximamente con patronales de sectores que representan a empresas con un alto consumo eléctrico como Oficemen, Unesid o Feique, entre otras.
El Gobierno avanzó el pasado jueves que no iba a aprobar en el Consejo de Ministros el proyecto de estatuto para los grandes consumidores de energía eléctrica por las alegaciones planteadas por la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), cuyas consideraciones aconsejaban revisar el contenido del borrador a fin de garantizar la máxima seguridad jurídica.
La CNMC entiende que los mecanismos incluidos en el proyecto del estatuto de consumidores electrointensivos, que persigue paliar el efecto que tiene la factura eléctrica en las grandes industrias, deben ser vistas como ayudas de Estado.
