Llega a juicio la tangana en un burdel de Rinlo en 2016 que dejó dos heridos

La tangana ocurrida en la madrugada del 31 de diciembre de 2016 en un burdel de Rinlo, que acabó con dos clientes heridos, se juzgará la semana próxima en el Penal número 2 de Lugo tras la imposibilidad de hacerlo en febrero del pasado año por la ausencia de dos testigos. En la vista, se juzgará a cuatro acusados: el dueño del local, otro hombre y dos mujeres que ejercían la prostitución, para los que el fiscal pide para cada uno de ellos tres años de prisión por sendos delitos de lesiones. Una pena a la que se suma una indemnización conjunta de 25.000 euros para el contusionado más grave y 2.000 para el otro herido, además de tener que hacer frente a los gastos causados al Sergas por la atención médica prestada a los dos hombres.

Los hechos, según el relato de la Fiscalía, sucedieron en torno a la una de la madrugada cuando dos hombres que acudieron al pub se vieron involucrados en un altercado con el encargado del mismo, que es uno de los acusados. Junto a él se juzga también a dos de las mujeres que trabajaban en el local y que "golpearon violentamente a los dos acusados" con los taburetes metálicos que había en el interior del establecimiento y que llegaron a arrojar contra los dos hombres, a los que siguió agrediendo el encargado, y que se vieron obligados a huir.

Justo en ese momento llegaba al local el otro de los acusados, en compañía de cinco o seis personas que no han sido identificadas y que se unieron a la agresión, tanto dentro del burdel como en el exterior.

La secuencia de los hechos había tenido una gran repercusión mediática al filtrarse dos vídeos de la pelea, en la que se veía en tanga a algunas mujeres participantes en la pelea, que terminó con dos heridos. El más grave necesitó 229 días para curarse de unas lesiones que le afectaron sobre todo a la pierna izquierda, de los que cinco fueron de hospitalización y otros 101 impeditivos para sus ocupaciones habituales. Su compañero tardó en curar siete días de unas heridas para las que el Sergas reclama 482,64 euros y 17.425,73 para el otro herido.