Un vecino de Viveiro quedó a última hora de este lunes en libertad con medidas de alejamiento, decretadas por el juzgado vivariense al que pasó a disposición después de una presunta agresión física a su pareja el domingo pasado.
Una patrulla de la Policía Nacional detuvo al hombre en el propio domicilio tras recibir la llamada de la víctima, que manifestó que padecía violencia de género psíquica desde hace bastante tiempo.
El afectado no podrá acercarse a menos de 50 metros de la mujer ni comunicarse por ningún medio.