El juzgado de Viveiro investiga una posible imprudencia médica en Burela

Los familiares de una mujer fallecida el pasado febrero denunciaron al médico de cabecera

El juzgado de Viveiro admitió a trámite la denuncia presentada por los familiares de una mujer fallecida en Burela el pasado mes de febrero contra el médico de cabecera de la mujer porque ellos consideran que ha existido una imprudencia profesional del facultativo. Según el juzgado, los hechos narrados en la denuncia "presentan características que hacen presumir la posible existencia de delito de imprudencia médica con resultado de muerte".

Según aparece reflejado en el texto de la denuncia presentada en el cuartel de la Guardia Civil de Burela el pasado día 27 de febrero, los hechos empiezan el mes de octubre de 2017. En ese momento, la mujer acudió a su médico de cabecera en el Punto de Atención Continuada (PAC) de Burela por un dolor lumbar y abdominal muy intenso, así como falta de apetito y una pérdida de peso muy pronunciada. El primer diagnóstico del médico, según relataron los familiares de la mujer en la denuncia presentada, fue una lumbalgia recetándole un relajante muscular.

Al ver que los síntomas no remiten sino que van en aumento, la mujer acude de nuevo al facultativo en numerosas ocasiones a lo largo de cuatro meses, "variando el diagnóstico a síndrome nervioso, menopausia, etcétera".

Finalmente y viendo que no tenía ninguna mejoría, la mujer acude el pasado 7 de febrero al servicio de Urgencias del Hospital da Costa de Burela donde queda ingresada en observación y al día siguiente le diagnostican cáncer de páncreas. El día 25 de febrero, la mujer fallece, "por parada cardiorrespiratoria", según el certificado médico.

Los familiares cursan esta denuncia al considerar que "ha existido imprudencia profesional por parte de su médico de cabecera", según exponen en la denuncia realizada en el cuartel.

DILIGENCIAS. Ante las circunstancias narradas en el texto de la denuncia, el juzgado de instrucción número 1 de Viveiro considera que "no estando determinadas la naturaleza y circunstancias de tales hechos ni las personas que en ellos han intervenido es procedente (...) instruir diligencias previas y practicar aquellas esenciales encaminadas a efectuar tal determinación y, en su caso, el procedimiento aplicable".

De esta forma, se acuerda iniciar las diligencias previas que implican una investigación del caso para determinar la responsabilidad del médico en los hechos.

Según figura en el escrito del juzgado, este ordena que se tome declaración a los familiares de la víctima que presentaron la denuncia y que se solicite al servicio de Archivo y Documentación Clínica del Sergas el historial clínico de la fallecida. Asimismo, se remitirán al fiscal los autos para que "en su caso, informe de lo que estime pertinente".

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