Los tres jóvenes fallecidos en San Tirso serán enterrados este domingo

Los entierros están previstos en Riotorto, Vegadeo y Castropol

Accidente en el que murieron tres personas en A Pontenova. SEPA
photo_camera El lugar del accidente. SEPA

Los tres jóvenes fallecidos este viernes por la tarde en una brutal colisión entre el vehículo en el que viajaban y un camión en la N-640 a su paso por el concejo asturiano de San Tirso serán enterrados este domingo.

El funeral por el  joven pontenovés Andrés Pardo Barcia, de 30 años, está previsto en la iglesia de San Lorenzo de Muxueira en Riotorto, donde residía con su mujer y su hijo. El de Carlos Murias González, de 23 años y vecino de Castropol aunque residía en Vegadeo, está previsto en la iglesia de San Luis de Blamonte en Castropol. Y el de Nicolás Andrés Carbonel Vaz, de 35 años, será en San Esteban de Piantón, Vegadeo. 

Los tres jóvenes perdieron la vida cuando volvían de comer a su trabajo en Talleres Julio de San Tirso. A la altura de la curva de Xesteira, en el límite entre los municipios de san Tirso y Trabada, el coche en el que viajaban se empotró de frente contra un camión, propiedad de una empresa de transportes de Vilameá, en A Pontenova. Dos de las víctimas fallecieron en el acto y el tercero mientras eran atendido en el lugar del suceso por los servicios de emergencia.

La dimensión de la tragedia tiene innumerables variables. El pontenovés Andrés Pardo acababa de ser padre. Se trata de una persona que no solo trabajaba en un taller sino que vivía a fondo el mundo del motor. De hecho estaba muy implicado en el club Os Fozamontes de A Pontenova, donde realizan diversas actividades vinculadas al mundo de los vehículos todoterreno. Al chico más joven, Carlos Murias  todos le califican como «un chaval muy sensato, con la cabeza encima de los hombros». Tiene un hermano más pequeño y su familia es bien conocida en Vegadeo. Además se da la circunstancia de que había perdido a su padre hacía poco más de un año. En Vegadeo jugó al fútbol en las categorías inferiores aunque finalmente lo había dejado porque el trabajo no le permitía continuar con algo que, a decir de quienes lo conocían, se le daba realmente bien. A Nicolás Andrés Carbonell Vaz le conocían por un sobrenombre que no dejaba lugar a dudas sobre su origen: El Uruguayo. Se había encuadrado perfectamente en Piantón y estaba afianzado en su puesto de trabajo en San Tirso.

Los municipios de A Pontenova y Vegadeo han decretado tres días de luto oficial por el fallecimiento de los tres jóvenes. 

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