Los jabalíes se ceban con una finca cerrada en el centro de Vilaselán

Los animales llegaron hasta la misma puerta del garaje
Ramón Cancio muestra los destrozos del jabalí en su finca. P.V
photo_camera Ramón Cancio muestra los destrozos del jabalí en su finca. P.V

Ramón Cancio y su mujer tienen una buena finca en el centro de la parroquia ribadense de Vilaselán. Está perfectamente cuidada pese a que él tiene ya 92 años y ella casi ochenta. Ahora se enfrentan a un enemigo que se la estropea con el que no contaban: el jabalí.

En las últimas semanas estos animales les hicieron varias visitas sin ningún tipo de miedo, llegando hasta la misma puerta del garaje y a la zona en la que comen al aire libre cuando el tiempo se lo permite. La última fue durante el pasado puente del Pilar y les dejó la finca destrozada en varias zonas.

Ramón Cancio cuenta que ni tan siquiera sabe por dónde acceden a la finca ni por qué, ya que solo levantan unas zonas concretas de césped: "Vese que alí hai algo que lles debe gustar porque fozan eses sitios e non outros".

Como está todo cerrado "non sabemos como se meten. Cremos que hai dous sitios que poden ser, pero non o temos claro, pero é algo desesperante porque xa non sabes que facer. Plantas esto e cóidalo, nun sitio que está protexido e aparéceche destrozado".

Dice que los animales suelen presentarse en grupos generalmente hacia la puesta de sol o en las primeras horas de la noche, nunca de día. No tiene ni idea de dónde pueden venir ni, sobre todo, "como se atreven tanto. Unha vez a miña muller estaba na planta baixa e un chegou alí mesmo. Empezou a darlle palmas para que marchase, pero non se asustaron en ningún momento".

Llamaron al Seprona "e foron moi amables, atendéronnos moi ben, pero claro, non hai moito que poidan facer. Dinnos de falar co couto, pero non sabemos que facer e isto desespera".

HABITUAL. Ramón Cancio asegura además que este problema que afrontan ellos no es algo excepcional "porque está pasando en toda esta zona de Vilaselán. Hai un veciño que viu pasando unha camada de sete por diante da súa casa". Añade que a otros también les hicieron algunos destrozos y hace tiempo que a otro vecino le mataron un perro.

Por eso se animan a hacer pública esta situación "para que a xente o diga e a ver se entre todos conseguimos que se faga algo, porque isto é un desastre e habería que buscarlle unha solución".

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