La Invernal de Galicia, organizada por el motoclub Ruta N-634 en Mondoñedo, no defraudó en su regreso al calendario de las concentraciones moteras. Es la primera de la comunidad y de las primeras de España, tras Pingüinos y Motauros, y este sábado reunió en la ciudad a más de 400 amantes de las dos ruedas.
A media tarde las motos seguían llegando a la ciudad y el presidente del motoclub, Miguel Arias, advertía de que superarían las inscripciones previstas que eran 400 y no ocultaba la satisfacción de toda la organización por el poder de convocatoria. Al final llegaron a los 450 participantes. De hecho, las inscripciones para acercarse este fin de semana a Mondoñedo ya superaban ampliamente el centenar a finales de febrero, a falta de más de quince días para la fecha.
La llegada de moteros, que inundaron las carreteras de la comarca al acercarse a Mondoñedo desde distintos puntos de la zona y del resto de Galicia, así como de lugares más distantes como Madrid, Barcelona, Valladolid, León o Asturias, se sucedió a lo largo de todo el día.
Durante toda la tarde hubo distintas actividades como un toro mecánico, juegos, música y sorteos y hasta la posibilidad de hacerse un tatuaje allí mismo al desplazarse desde Euskadi una tatuadora. A última hora fue cuando el rugido de las motos sepultó cualquier otro sonido de la ciudad con el desfile de todos los participantes por las calles, que terminaron en una cena de comunidad en la finca San Antonio.
Por la noche se celebró la verbena con el grupo 2.Com y la orquesta Principal y se sirvió la tradicional queimada como fin del día.
