La intranquilidad crece en la parroquia de Fazouro tras trascender la ocupación de una vivienda en el barrio de Santo André. Un inmueble que lleva deshabitado más de una década y en la que se ha instalado alguien sin autorización de sus propietarios, que presentaron denuncia el pasado lunes tras tener constancia de que alguien había entrado en el inmueble, al que accedieron sin permiso, pero sin utilizar la violencia.
La preocupación es aún mayor porque se desconoce cuántas personas residen en la vivienda y el tiempo que llevan en ella, al parecer ya varios días, pero sus escasos movimientos apenas despertaron la alerta del vecindario, por lo que tardó en descubrir que la casa había sido ocupada.
Un hecho a lo que ayuda la situación del inmueble, sin otras edificaciones cercanas y situada algo alejada de la carretera principal hacia San Acisclo y con otro acceso posterior, prácticamente intransitable.
El presidente de la asociación de vecinos de Fazouro, Raúl Río, reconoció este miércoles que fueron varios las personas que lo llamaron preocupados por la situación. Habitantes de toda la parroquia que temen que los hechos puedan reproducirse e incluso que se acrecienten los robos, por lo que pedirán una reunión con los responsables municipales para que puedan mediar ante las autoridades para tratar de dar una salida a la situación, que aún sorprende en una localidad tranquila, donde la gente vivía con confianza y ahora cada vez son más los que lo hacen con miedo.
La alcaldesa en funciones, Inés López Couto, conoció por las fuerzas de seguridad el hecho, que es la segunda ocupación que trasciende en Foz en unos meses, lo que acrecienta la preocupación.
