Imponen 15 meses a un contramaestre que intentó acuchillar a un marinero

El barco zarpó de Burela y el acusado amenazó a dos tripulantes ► A uno de ellos le sacó medio cuerpo fuera de la barandilla del buque

El contramaestre acusado de acuchillar a un marinero. P.V
photo_camera El contramaestre acusado de acuchillar a un marinero. P.V

Reconoció ante la jueza que les hizo la vida imposible a dos compañeros a bordo de un barco y aceptó una condena de 15 meses de prisión. El contramaestre condenado este jueves en el Penal número 1 de Lugo amenazó a dos marineros, los insultó y llegó incluso a intentar acuchillar a uno con una navaja.

Los hechos ocurrieron a mediados de junio del 2015, cuando el acusado, con iniciales E.M.R.F., embargó para una marea de 13 días que terminó en Burela el 1 de julio. Desde el momento en que zarpó el buque, el acusado, "obrando con el ánimo de amedrentar a dos marineros de origen senegalés", se dedicó a gritarles y a zarandearlos, diciéndoles continuamente que si las cosas no se hacían como a él le daba la gana, los tiraría por la borda.

Durante toda la marea, el acusado los golpeó -aunque no consta que les provocara lesiones- y les decía frases como: "Hazme caso o te golpeo, te voy a matar, cuando lleguemos a tierra te voy a arrancar la cabeza, te voy a mandar gente para que te mate, todo Burela me conoce, no os vais a ir sin que os mate, negros maricones, me dais asco".

La situación era tan tensa que los dos marineros apenas podían dormir por temor a que los atacara por la noche. Además, el acusado les decía que si le contaban algo al patrón les partiría las piernas.

Un día, el contramaestre cogió por el pecho a uno de los marineros senegaleses y le sacó medio cuerpo fuera de la barandilla del buque, al mismo tiempo que lo zarandeaba y amenazaba con tirarlo al mar. Al ver que su vida podía correr peligro, los dos marineros se quejaron al patrón del barco y el hombre le comunicó de inmediato al contramaestre que no seguiría a bordo.

La noticia de que tenía que dejar el barco le sentó muy mal al acusado, por lo que llamó a gritos a los dos marineros y les dijo que subieran a la cubierta del barco. Una vez allí, ser acercó a uno de los senegaleses e intentó agredirlo con un bichero y luego con una navaja. La agresión no acabó en tragedia porque se interpusieron el patrón y otro marinero.

ANTECEDENTES. El agresor fue acusado inicialmente de un delito continuado de amenazas y dos faltas de maltrato de obra, por los que se enfrentaba a un total de dos años de cárcel y doce días de localización permanente.

La Fiscalía retiró el jueves la acusación por las faltas y mantuvo el delito de amenazas, por el que pidió un año y tres meses de prisión, una condena que fue aceptada por el acusado. La representante del ministerio público le aplicó la agravante de reincidencia, ya que E.M.R.F. tiene antecedentes penales por varios delitos de maltrato en el ámbito familiar, lesiones y amenazas. De hecho, actualmente cumple condena en una cárcel y ayer fue trasladado a los juzgados por la Guardia Civil.