La resolución del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que estima en parte las demandas del comité de empresa de Alcoa y ordena a la empresa abstenerse de parar las cubas en la factoría de San Cibrao ha sido bien acogida tanto por el Gobierno central como por la Xunta, que llaman a la compañía a recuperar el diálogo.
En concreto, la ministra de Industria, Reyes Maroto, aseguró este miércoles que sigue "tendiendo la mano" a Alcoa en busca de un acuerdo para "buscar soluciones para la planta de San Cibrao" tras el auto del TSXG, lo que considera "un éxito sin precedentes".
En un comunicado, celebra esta decisión del alto tribunal gallego al atender las reclamaciones de los trabajadores, mientras destaca que el TSXG considera al ministerio y a la Xunta parte interesada en el conflicto al respaldar que la planta siga en funcionamiento.
Por ello, Maroto considera que esta decisión es un buen precedente que permite mantener activa la planta y preservar los puestos de trabajo, al tiempo que apela a llegar a un acuerdo.
Recuerda que en la vista, el Gobierno expresó su postura a favor de dos medidas cautelares: la paralización del Ere que afectaría a 524 personas y el aplazamiento de la paralización de las cubas hasta que un tribunal determine si el Ere es un fraude de ley.
La Xunta subraya que pedirá la intervención de la planta si Alcoa rechaza dialogar e insiste en la paralización de las cubas
La Xunta, por su parte, espera que el fallo del TSXG suponga un "punto de inflexión", que sirva para "recapacitar" a la compañía y acceda así a la venta de la planta de San Cibrao. El Gobierno gallego valora que el tribunal conceda las medidas cautelares "solicitadas por el comité y sindicatos", que contaron "con la colaboración", ya que "da la razón tanto a los trabajadores como a las administraciones".
Por tal motivo, emplaza a Alcoa a que "vuelva a la senda del diálogo", pues "la mejor salida para todas las partes es que acepte la venta de la planta de aluminio primario". "En ningún caso podemos contemplar el cierre de la única fábrica que produce en este momento aluminio primario en España como una opción. Carece de cualquier sentido desde el punto de vista empresarial, económico o estratégico", avisa.
Y es que el Gobierno gallego sostiene que Alcoa "sigue estando a tiempo de recapacitar", por lo que pide a la compañía que "acepte sentarse de nuevo a dialogar y llegar a un acuerdo". Eso sí, advierte de que "de persistir en su manía de no dialogar y de insistir en la paralización de las cubas, la Xunta ya dejó claro que le pedirá al Gobierno la intervención temporal de la planta de aluminio".
Mientras, asegura que seguirá colaborando con los sindicatos y aguarda que el Gobierno "mantenga la actual línea de cooperación", al tiempo que presente medidas para un marco energético estable.
