El equipo de gobierno de Burela propone la creación de una comisión para analizar los vestigios del franquismo en el municipio y tomar decisiones para la aplicación de la ley de memoria histórica. Según explicó este martes el alcalde, Alfredo Llano, la idea es que en este organismo estén integrados los grupos de la corporación, un experto en historia o en cultura y el arquitecto y el secretario municipales, "que ademais poderán pedir asesoramento externo se o precisan".
La propuesta para crear esta comisión figura en la moción de sustitución que los socialistas presentan a la moción que presenta el BNG para retirar el nombre del obispo Leopoldo Eijo Garay a una calle de la localidad, así como el título de Hijo Adoptivo. "Non se pode eliminar o nome a unha rúa así de golpe, hai que estudar este caso igual que outros que poida haber no municipio", dijo Llano.
En este sentido, ya se pronunciaron el martes desde el BNG asegurando que rechazarán la enmienda de sustitución, "porque eso implicaría votar só a súa moción". De todas formas, avanzan que están estudiando el hecho de aceptar esta propuesta como una añadidura que se incluya en la suya. "Estamos estudando aceptar crear a comisión, aínda que xa foi unha proposta que se plantexara en 2009 cando o colectivo Buril presentara unha iniciativa similar e non se chegou a facer nada", explican desde el BNG, donde añaden que "hai suficiente documentación para saber cal foi o papel de Eijo Garay e motivos de sobra para retirarlle a rúa".
Los nacionalistas también consideran que las "xestións" que Eijo Garay hiciera en Burela no justifican su nombre en una calle, "pois calquera cuestión beneficiosa para Burela queda anulada pola súa colaboración e implicación posterior no réxime franquista".
En este sentido, los populares avanzaron que votarán en contra de la retirada del nombre: "Non se vive mirando ao pasado".
