Guardia Civil y Policía Local de Foz procedieron a la denuncia y al cierre de tres establecimientos de hostelería y restauración por incumplimiento de la normativa vigente. En uno de los casos, el local carecía de la preceptiva licencia, mientras que en los otros dos se encontraban abiertos fuera del horario de cierre. La sanción puede llegar a los 3.000 euros y desde las fuerzas del orden se hace un llamamiento a la responsabilidad para evitar los contagios por Covid.
Las inspecciones se realizaron en la madrugada del pasado domingo dentro de un operativo conjunto entre ambos cuerpos, que llevó también a la identificación de varios jóvenes, a la disolución de dos botellones y a la imposición de denuncias por conducción negligente, además de otra multa, en este caso en la tarde del domingo, a una persona en estado de embriaguez por no usar mascarilla.
También se está investigando el ataque sufrido en las dependencias de la Policía Local de Foz, contra la que lanzaron dos piedras de grandes dimensiones que llegaron a romper dos cristales. Se están analizando las imágenes de las cámaras de seguridad para tratar de identificar a los autores de los hechos.
