Investigan las causas del incendio que calcinó la nave de Distribuciones Carreiras

El fuego se dio por controlado a las diez de la noche, pero no por extinguido, y quedó un retén para evitar que se avivaran las llamas ► Los daños estructurales del inmueble son severos, pero habrá que esperar a la investigación para saber si se mantiene en pie
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photo_camera El incendio se dio por controlado a las diez de la noche, pero no por extinguido. D.V

El viento fue el peor aliado en la tarde de este jueves a la hora de sofocar el incendio que se inició a las cuatro menos cuarto en la nave de Distribuciones Carreiras, que ocupa la parcela 137 del polígono industrial de Cuiña.

Un incendio, del que se investigan las causas, y que devoró por completo las instalaciones, que ardieron en apenas una hora, a pesar de los numerosos medios que se movilizaron, con efectivos de los parques de bomberos de Viveiro y Barreiros y el GES cervense, además de Guardia Civil, Protección Civil de Burela y de Xove, que prestó una motobomba y una ambulancia del 061, aunque por fortuna no se registraron heridos.

El fuego se inició en la parte trasera de unas amplias instalaciones, que ocupan unos 2.000 metros cuadrados de extensión en el polígono cervense desde donde la firma, con 34 empleados, abastece de productos de alimentación y bebidas al sector hostelero de toda la comarca, el Occidente de Asturias y el norte coruñés.

La zona en la que se inició se usaba como almacén y fueron los propios empleados, al parecer, los que trataron de sofocarlo en un principio, pero el abundante humo les hizo desistir.

Lo que sí lograron fue sacar los coches y camiones aparcados en la nave e incluso algunas máquinas, una operación que incluso pudieron realizar cuando los primeros efectivos de emergencias estaban ya en la zona, por la que se veía a trabajadores y curiosos deambular, incluso al propietario de las instalaciones hablando con los bomberos, por lo que nada hacía presagiar la desgracia que se avecinaba, pues en cuestión de minutos el fuego se fue avivando hasta terminar calcinando casi por completo la nave.

Respaldo: el propietario destaca la ola de solidaridad que despertó su desgracia, con apoyo de clientes, empresas y compañeros de profesión

Daños internos. La estructura se mantenía anoche en pie y, aunque habrá que esperar a futuras inspecciones para conocer con detalle los daños internos que presenta, parece muy complicado que pueda recuperarse en su totalidad.

De hecho, los trabajadores ya lo veían como algo casi imposible, por los destrozos que suponen que provocaron las altas temperaturas alcanzadas por el fuego dentro de la nave.

Unos empleados que estuvieron toda la tarde a las puertas del inmueble, viendo impotentes cómo se consumía la empresa de la que dependen muchas familias y de la que se sienten un piña y no había más que ver cómo algunos no podían contener las lágrimas y ninguno quiso marcharse en toda la tarde, incluso se acercó alguno que no estaba trabajando por tener un familiar ingresado, lo que da idea del grado de implicación de todos ellos y de que sienten la empresa como suya.

No dejaron tampoco de arropar a su responsable, Ángel Carreiras Cillero, pues "se lo merece", aseveraban los trabajadores, en corrillos, casi sin creerse lo que estaba ocurriendo y lo pronto que desaparece el trabajo de todo una vida.

"La empresa la hace el equipo humano y aquí están todos", contaba el responsable, muy afectado, pero conservando la serenidad y aseverando que "nos sentaremos y veremos qué podemos hacer", señalaba con respecto a cómo afrontar el futuro inmediato de la empresa.

De momento, y a pesar de vivir uno de los peores días de su vida, sacaba fuerzas para agradecer la solidaridad recibida tanto de las grandes empresas con las que trabajan como de las de pequeños restaurantes a los que abastecen.

"Quiero agradecer la buena disposición de todos y a los clientes decirles que hasta la semana que viene no los podremos atender en condiciones", unos clientes que eran los primeros en sus pensamientos porque son los que mantienen la firma.

"El teléfono no paró y hay llamadas que no he podido ni contestar, pero hemos tenido el apoyo de las marcas, de compañeros de la distribución, de restaurantes, de clientes...", unas muestras de solidaridad que llegaron a ofrecerle un solar donde poder guardar anoche los coches de la empresa.

"La verdad que la solidaridad ha sido impresionante y se agradece, porque es una pena que ocurra esto, que es como la gota que colma el vaso después de todo lo que llevamos pasado con la pandemia", contaba otro empleado.

No fueron pocas las voces que criticaron la actuación de los efectivos, a los que afearon la tardanza, pero sobre todo la falta de medios, pues el grueso del incendio se produjo cuando ya estaban allí desplegados.

Los productos acumulados en la nave, muchos bebidas alcohólicas, también pudieron contribuir a la rápida expansión del fuego, como también el material del que están revestidas las planchas tipo sandwich, lo que supuestamente provocó un efecto chimenea que avivó el fuego desde la parte trasera hasta la fachada convirtiendo las oficinas -única estancia con ventanales el exterior- en una sala devorada por las llamas y una de las imágenes de la desolación, como también lo era el rótulo con el nombre de la empresa y las letras retorcidas por el calor.

Plantilla: los trabajadores, 34 en diferentes puestos, se mostraron consternados a las puertas de la fábrica. "Somos una familia", aseguran 

Los efectivos de emergencias trabajaron durante toda la tarde en la extinción y fueron miles de litros de agua por minuto los que se usaron para tratar de atajar el fuego en diferentes frentes, por lo que hubo momentos de escasez, pero debido a la gran cantidad de agua demandada para lo que se usaron varios camiones para hacer más fácil desplazarse por distintas estancias.

En torno a las diez de la noche el incendio se dio por controlado, pero no por extinguido porque la caída de parte de las chapas de los diferentes puntos de fuego provocó rescoldos que son más complicados de apagar y podían reavivar las llamas.

Por ese motivo, un retén del GES de Cervo quedó toda la noche en la zona, al igual que la Guardia Civil con sus patrullas, que será quien se haga cargo de la investigación.

avisoAviso: se detecta el fuego y se avisa a emergencias

El aviso al 112 se produjo a las cuatro menos cuarto de la tarde por un fuego detectado en la parte posterior de la nave, que trataron también de sofocar los empleados con extintores, pero enseguida el humo llenó el inmueble y hubo que desalojar las instalaciones.
calma y temorCalma y temor: una situación que parecía controlada 

A la llegada de los servicios de emergencias la situación parecía controlada y una tensa calma
se respiraba entre trabajadores y vecinos, que permanecían en la entrada ajenos aún a lo que se venía encima pues nada hacía presagiar el cariz que tomarían los acontecimientos.
avanceAvance: las llamas se avivaron con el viento

El fuerte viento que soplaba este jueves es la causa más probable de que se descontrolara el fuego, que fue pasando de atrás hacia delante con enorme rapidez hasta que toda la nave se vio afectada, a pesar de los esfuerzos de los efectivos de emergencias, que actuaron en varios frentes.
catástrofeCatástrofe: el fuego devora las instalaciones

En apenas una hora el fuego devora prácticamente la estancia y las llamas son ya visibles desde la fachada, en cuyo lado derecho se sitúan las oficinas, que desaparecen absorbidas por la virulencia del incendio. El agua ya no podía frenarlas. 

 

Trámites: se tardarán unos días en conocer las causas
Los servicios de emergencias no se atrevían este jueves a aventurar una causa y lo más probable es que la investigación que determine el origen del suceso se demore aun unos días, porque hay que volver al interior y analizar todas las estancias, donde el calor anoche era aún sofocante.

Pérdidas millonarias

También habrá que evaluar las pérdidas económicas para la empresa, que serán millonarias pues poco material pudo salvarse. A las bebidas almacenadas se suman mucha comida en los congeladores, todo inservible, además de máquinas y el mobiliario

Subdelegada

La subdelegada en Lugo, Isabel Rodríguez, le trasladó al alcalde de Cervo la solidaridad del Gobierno de España por el siniestro y estuvo en permanente contacto con la Guardia Civil desplazada al lugar.

2004

Fue el año en que registró otro incendio en el polígono, en una nave de congelados.

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