El tren Feve también está parado y el desvío por Rúa, con peligro de desprendimientos

Situación tercermundista en A Mariña tras agrietarse la N-642 entre Foz y Burela
Obras en el punto del derrumbe de la carretera N-642. PALEO
photo_camera Obras en el punto del derrumbe de la carretera N-642. PALEO

La tormenta perfecta, o situación tercermundista como califican algunos viajeros, se cierne hoy sobre las comunicaciones de A Mariña, tras el corte de la carretera de la costa. Con la N-642 cerrada debido al socavón a la altura de la Areoura, cerca de Burela, el tren Feve se presentaba como una buena alternativa para acercarse desde Ribadeo o Foz al hospital o poblaciones como Xove y Viveiro pero la vía férrea también se ha visto afectada por el agua y las obras en la carretera, ya que discurre paralela a ella. 

Desde Renfe confirman que también el servicio ferroviario ha sido suspendido y los viajeros entre Ferrol y Ribadeo están siendo trasladados en autobús desde Viveiro, por el interior, por A Gañidoira. El problema de las comunicaciones se agrava al estar también cortado el desvío que se pretendía por la carretera provincial desde Burela a San Román de Vilaestrofe, una vía estrecha y revirada, sobre todo en los altos desde Rúa a Ferreira de O Valadouro, donde un camión ha tenido problemas y la propia Subdelegación del Gobierno ha cortado debido a los desprendimientos que hay por las últimas tormentas. Hay al menos un derrumbe en una curva y muchos conductores no conocen los desvíos adecuados e intentan orientarse con los GPS.

Se trata además, de una ruta con abundantes nieblas e los altos cercanos a parques eólicos. La preocupación fundamental es el servicio urgente al Hospital.