Una vecina de Burela de 88 años de edad falleció de manera fulminante al mediodía de este jueves en la calle Pardo Bazán, pese a que los servicios sanitarios acudieron de inmediato para realizar la reanimación, una operación que se prolongó durante más de una hora sin los resultados deseados.
Urxencias Médicas del 061 y personal del centro de salud burelés intentaron por todos los medios posibles que la mujer recuperase la consciencia, pero resultó imposible. La presencia de tres ambulancias en la calle, entre ellas la medicalizada, obligó a la Policía Local de Burela a cortar la circulación de manera temporal por esa vía.
El aviso se producía hacia las doce menos diez minutos de la mañana cuando otra persona alertó de que una mujer se había caído y golpeado la cabeza contra el firme tras apoyarse inicialmente en un coche próximo. La fallecida caminaba en el sentido de la marcha de los vehículos cuando le sobrevino posiblemente un infarto.
