En busca del final de Consuelo

Un equipo de submarinistas se sumergió en la parte inundada de la mina de A Pontenova
Mina Consuelointernet
photo_camera Equipo que trabajó en la mina Consuelo, este sábado. CARLOS BERMÚDEZ

Quien les iba a decir a los mineros que a principios del siglo pasado extraían el hierro de la mina Consuelo de A Pontenova, que años después su camino lo volverían a recorrer equipos de especialistas para desentrañar los secretos que dejaron enterrados. Pues sí. El pasado siempre vuelve y A Pontenova está empeñada en no dejar ni un palmo de sus antiguas explotaciones de hierro sin descubrir. Ahora, con las visitas a los niveles 0 y -1 de mina Consuelo en marcha, el objetivo es seguir bajando y encontrarse con su verdadero final, el que sería el nivel -6, que según la información de la que dispone el Concello estaría muy próximo al nivel de la Praza dos Fornos. 

Este sábado un equipo de submarinistas de la empresa Geoceanic de Madrid estuvo cerca de hora y media buceando en el nivel -5 de la mina para seguir con los trabajos de topografía que ya se acometieron en el resto de los niveles superiores de la cavidad. Sin embargo, como explicó el técnico de turismo municipal, Carlos Morado, al final de la jornada, los avances no fueron muchos porque la escasa visibilidad en el agua impidió que se sumergieran más de los cien metros y que pudieran encontrar lo que sería la bajada al nivel -6.

Esta inmersión sirvió para comprobar que las galerías inferiores son tan grandes como las superiores, algo que facilita el trabajo de los profesionales para topografiar la cavidad

"Volverán máis adiante con dous días para poder organizarse e sondear o nivel -5 un día e ao seguinte baixar ao -6 si poden", explicó Morado, que añadió que lo que sí se constató en esta primera inmersión es que las últimas galerías son tan grandes como las anteriores y cuentan con altura suficiente, lo que facilita el trabajo de los especialistas. 

UN TESORO. La mina Consuelo se está revelando como el tesoro que ya muchos sabían que era. Los primeros días de su apertura al público, las visitas están teniendo mucho éxito. "É certo que  a xente achégase moi atraída pola tirolina porque é o que se publicitou máis, pero unha vez que descobren a mina quedan impresionados", reconoce Morado, que destaca que es "moi vistosa e moi cómoda para visitar". 

Tanto es así que el próximo jueves ya está prevista la visita de un colegio para acercar a los niños este espacio. 
 

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