Todavía no ha aprobado el Gobierno el Plan de Ordenación del Espacio Marino (POEM) al que se deberán ajustar los permisos para instalar parques eólicos en el mar pero organizaciones ecologistas como Adega ya han detectado contradicciones en proyectos como el que promueve la empresa madrileña Instalaciones y Servicios Moscardó III pues en la documentación sobre el parque Galwind, frente a la costa de Ortegal y A Mariña, aprecia "interferencia" con las áreas en las que existen fondos rocosos con hábitats protegidos por la Comisión Europea.
Estos lugares con corales fríos han sido vetados recientemente para la pesca de fondo pero podrían ser ocupados con los muertos, anclajes y líneas de evacuación, "dúas no caso do parque eólico mariño Galwind, de varias ducias de quilómetros cada unha".
Señala Adega que "a empresa non apunta impactos significativos aos fondos rochosos polos fondeos dos aeroxeradores e subestacións, infraestruturas que requiren de numerosas fixacións e estruturas ancoradas aos fondos, un mínimo de tres por muíño, de xeito permanente".

Indican además que en la cartografía del referido parque Galwind "pódese apreciar a sorprendente omisión dunha tesela de 2,69 quilómetros cadrados con fondos rochosos de corais fríos situada baixo o vértice sur do parque e o nivel de detalle da cartografía do proxecto non xustifica esta 'omisión' por canto incorpora os mesmos dados, á mesma escala e da mesma fonte que a documentación oficial", por lo cual Adega ve una afección no declarada en unos hábitats que la Comisión Europea acaba de excluir por decreto para la actividad pesquera de fondo.
Asimismo, al superponer la planificación de la eólica marina propuesta en el POEM a los polígonos donde se ha excluido la pesca hay zonas consideradas de "alto potencial eólico" y no es admisible que el Ministerio para la Transición Ecológica tramite dichas instalaciones, incumpliendo su propia moratoria acordada en el verano del 2021 y los vetos de la CE en esas áreas.
CORREGIR EL VETO DE LA CE
Respecto al veto europeo a la pesca en 87 caladeros del Atlántico Norte, el ministro de Pesca, Luis Planas, señaló que el Gobierno trabaja con sus homólogos de Francia, Irlanda y Portugal y con la propia Comisión Europea para "corregir la situación producida", en particular con el palangre de fondo, en base al asesoramiento del Instituto Español de Oceanografía.
Planas hizo esas declaraciones el jueves en Vigo y ayer matizó que no se ha pedido la suspensión cautelar en el recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea porque "lo desaconsejan todos los juristas". El ministro no cree que haya una solución este mes y apeló a la paciencia y a "negociar duro" y demostrarles a las autoridades europeas que los datos en los que han basado su decisión de veto en los cantiles "no son los correctos".