El problema con el transporte escolar de la pequeña Saray Martínez Ramos, una niña de la parroquia de As Oiras, en el municipio de Alfoz, está más cerca de solucionarse. Fuentes de la Xunta de Galicia avanzaron ayer que están estudiando una alternativa para acercar el transporte escolar a su vivienda. Su familia había denunciado que una modificación en la línea de transporte escolar la obligaba a caminar casi dos kilómetros hasta la parada del bus que la lleva cada día al instituto de Alfoz-Valadouro, donde cursa primero de la Eso.
La pequeña y su familia se quejaban de que, antes de ella, se recogía a su hermana en una parada más cercana sin problema y no entendía por qué a ella ahora no la recogían. La Consellería de Educación lo explicó ayer aduciendo que lo que sucedía era que el vehículo con el que se está realizando el transporte escolar ahora es de mayor tamaño que el anterior que cogía a su hermana.
En el mismo viajan ya todos los niños que pueden hacerlo y dicho autobús no puede llegar hasta la parada concreta de la zona de Riba do Río, que es la que corresponde a su casa, que está en el barrio de Aguillón de la parroquia de As Oiras.
El vehículo en cuestión tendría que afrontar una pendiente demasiado pronunciada y en ningún caso podría realizar un giro que tiene que hacer para emprender el viaje hacia el instituto, siempre según fuentes de la Xunta.
No obstante, reconocen que se trata de un caso muy especial porque aunque la alumna vaya ya al instituto, no deja de ser una niña de once años y aseguran que están buscando una solución junto con la empresa concesionaria del servicio, que es Arriva, e indican que será cuestión de días.
Desde la Xunta apuntaron también que la distancia a recorrer desde la casa de Saray Martínez a la parada de bus que le corresponde es de 1 kilómetro, aunque explicitan que «neste caso dá igual» porque «é unha situación que imos atender e que queremos solucionar porque se trata dun caso especial».
Por el momento no se sabe cómo se solucionará este problema y si se hará mediante otro vehículo diferente o con algún otro método, pero aseguran que será algo que se hará «rápido».
PREOCUPACIÓN. Los padres de la pequeña habían mostrado su preocupación porque «temos que levar nós á pequena porque é un tramo sen casas e a cativa non o pode facer soa» y avanzan que es necesario atender esta situación porque «para o ano que vén vai haber outros dous nenos que se encontren igual en casas que hai aquí ao lado».
