Casi 120 toneladas de túnidos se han subastado en el puerto de Burela apenas transcurridas dos semanas desde el primer desembarco de bonito. El volumen de negocio, por su parte, asciende a 775.000 euros.
El gerente de Armadores de Burela, Miguel Neira, con el mes de junio cerrado, el primer mes de campaña, ha hecho un "balance parcial", de una campaña aún por terminar. "No podemos sacar muchas conclusiones", ha reconocido.
No obstante ha constatado que "el arranque es mejor que el de los dos últimos años". "Se subastaron 120.000 kilos, con un volumen de negocio de 775.000 euros. Es más cantidad que en los últimos dos años, pero aún está lejos de lo que para nosotros sería interesante, y sería interesante rondar las 300.000 toneladas", ha apuntado.
De Burela son cinco embarcaciones las que han salido a la costera además de barcos de otras comunidades. La primera subasta de la campaña se produjo el 14 de junio, y desde esa fecha hubo bonito en la lonja de Burela, según ha comentado Neira.
El precio medio del kilo se ha situado en casi 6,50 euros (6,47), lejos de los 8 en que se llegó a subastar el kilo en los primeros desembarcos. Esta caída de los precios se debe a que en la "última semana hubo un incremento de la oferta", ha explicado.
