En distintas ocasiones los vecinos de Landrove alertaron del deterioro que sufría el puente medieval por el desprendimiento de piedras del tajamar. La situación se continuó agravando y ahora el Concello remitió a Augas de Galicia y al Servizo de Patrimonio Cultural de la Xunta una memoria sobre el estado de la infraestructura y la solicitud para actuar "á maior brevidade posible" para evitar males mayores.
En el documento, realizado por la directora de la oficina de rehabilitación municipal, "faise unha descrición da ponte e das súas patoloxías, explicando que se permite abordar unha intervención que permita evitar a súa degradación e os posibles danos materiais que suporían o seu desmoronamento", según explica la alcaldesa, María Loureiro. El documento detalla que la pérdida de sillares y de material de las juntas es "moito máis acusada" en la parte del puente que recibe la fuerza del caudal, pero también está deteriorado el tajamar de aguas abajo "sobre todo pola presenza da vexetación".
Las obras que el Concello propone ejecutar son la eliminación de la vegetación adherida a las fábricas del puente y la que oculta al arranque de los arcos, como hiedras, hierbas, árboles y musgos, una tarea que se haría "a man e con utensilios que non provoquen erosións"; la reconstrucción del tajamar de la pila central del puente con la colocación de los sillares desplazados, y la restauración de ribera autóctona en los alrededores para evitar la presencia de especies invasivas.
La alcaldesa apunta que enviaron el informe el 22 de octubre y este lunes recibieron la resolución de Patrimonio, que autoriza la limpieza de la vegetación pero propone aplazar la actuación en el tajamar y las fábricas del puente hasta que no esté limpio y se haga un levantamiento de su estado actual para analizar el alcance de las obras propuestas. El Concello aún no recibió la contestación de Augas y desconoce qué administración ejecutará los trabajos.
