As Catedrais cuenta con más de mil reservas diarias para Semana Santa

Viernes Santo, como sucede cada año, se destaca como la jornada con más solicitudes. Esta circunstancia beneficiará turísticamente a la comarca mariñana, pero sobre todo a Ribadeo
Dos visitantes, en As Catedrais. JOSÉ Mª ÁLVEZ
photo_camera Dos visitantes, en As Catedrais. JOSÉ Mª ÁLVEZ

La apertura del plazo de reservas para visitar la playa de As Catedrais por parte de la Xunta de Galicia en la web específica para ello arroja resultados sorprendentes pese a que para los días más fuertes desde el punto de vista turístico falta todavía una semana. Para cada día en los que es necesario realizar una reserva para acceder al arenal, entre este sábado y el lunes día 5 de abril incluido, hay ya más de mil reservas realizadas en todos los casos.

Por el momento, y como sucede cada año, parece que el Viernes Santo es la jornada más requerida por los visitantes. Este año esto se verá reforzado por una circunstancia fundamental en el caso de las visitas a la playa ribadense, como es el horario de mareas. Ese día la marea baja será a las dos y media de la tarde. Es un horario muy bueno para poder visitar el arenal un poco antes o un poco después e ir a comer justo antes o después de haber visto la playa.

Otros días con buenas cifras de reservas son este próximo domingo con 1.233 reservas o el Jueves Santo, con 1.270. Hasta el momento la jornada con menos solicitudes para ir a ver As Catedrais es el lunes 5 de abril, con 1.096 reservas realizadas en la web http://ascatedrais.xunta.gal.

TRASCENDENCIA. Si estas cifras siempre son tenidas en cuenta porque ofrecen un reflejo importante del número de visitantes que se pueden esperar en general, este año resultan capitales. La incertidumbre sobre qué sucederá con el número de visitantes en la comarca mariñana en general y en Ribadeo en particular a consecuencia de las medidas que obliga a imponer la pandemia hace que esas reservas puedan tomarse como un indicativo que puede ofrecer un cierto optimismo moderado.

A solo un día del comienzo del control de acceso a la playa ribadense, estas cifras están por debajo de las que había en 2019, ya que el año pasado la movilidad estaba prohibida, pero no excesivamente alejadas, lo que es un soplo de esperanza ante las dudas que suscitan los cierres perimetrales de las comunidades autónomas.

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