El asalto al cura de Vieiro tiene semejanzas con otro en Cospeito

Hombres altos y encapuchados abordaron en diciembre a un septuagenario cuando iba a entrar en su casa y lo ataron para robar

VIVEIRO. Los asaltos a viviendas para robar, aún con los moradores en su interior, se repiten en la provincia en los últimos tiempos. Entre los más llamativos están los de dos ancianos de Ribadeo que fueron víctimas en el pasado mayo de un intento de robo con una brutal agresión, o el de una familia de Sarria con dos niños pequeños que en septiembre fue amordazada en su casa. El último conocido es el de un vecino de 78 años de Muimenta (Cospeito) al que unos hombres asaltaron el 18 de diciembre cuando iba a entrar a su vivienda, en un caso que guarda ciertas similitudes con el asalto que sufrió el cura de Vieiro el pasado viernes.

En ambos robos las víctimas son personas mayores que viven solas y que entraban en sus casas al anochecer cuando fueron abordadas de forma sorpresiva por los ladrones, hombres de estatura elevada -eran dos en Muimenta y tres en Vieiro- que llevaban la cara cubierta. Al chairego le taparon la boca, le ataron las manos con una cinta y lo dejaron boca abajo en la cocina mientras buscaban el dinero, unos 6.000 euros. No llevaban armas y no le hicieron daño. En el asalto de Vieiro al sacerdote lo ataron de pies y manos con cinta y tampoco lo hirieron, pese a que llevaban una pata de cabra con la que rompieron mobiliario, y antes de huir lo amarraron a una silla. En ambos casos los ladrones solo querían dinero en metálico.

La Policía Nacional tiene por delante una ardua tarea para localizar a los autores del robo de Vieiro ya que actuaron con todos los cuidados para no ser vistos y para no dejar huellas en el lugar de los hechos. Los investigadores recabaron información en la zona pero ninguno de los vecinos comentó haber visto nada sospechoso y tienen en cuenta también hechos similares ocurridos en los últimos meses por si pudiera tratarse de un grupo organizado.

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