Un árbol cortó el paso al bus escolar cerca de la Cova do Rei Cintolo en Mondoñedo

Los escolares esperaron media hora a que se despejara la vía

Bomberos de Barreiros este miércoles en Noceda. POLICÍA LOCAL RIBADEO
photo_camera Bomberos de Barreiros este miércoles en Noceda. POLICÍA LOCAL RIBADEO

La caída de varios árboles como consecuencia del último temporal de viento que azotó la comarca tuvo ocupados durante toda la mañana de ayer a los integrantes de Protección Civil de Mondoñedo, quienes tuvieron que acudir a primera hora para despejar la carretera que conecta con la Cova do Rei Cintolo, donde el autobús que realiza el transporte escolar por la zona no podía pasar, debido a la caída de un ejemplar que cortaba totalmente la vía. El vehículo pudo retomar su marcha al cabo de aproximadamente una media hora.

Los voluntarios de la agrupación mindoniense retiraron además los árboles que obstaculizaban otras carreteras municipales en Barral y Couboeira. También tuvieron trabajo los medios de la Diputación, que debieron quitar el caído en la que enlaza San Andrés con Masma, mientras que el personal de Conservación de la Xunta hacía lo propio en la LU-124.

Los bomberos de Viveiro llevaron a cabo varias actuaciones derivadas del mal tiempo. Este miércoles por la mañana retiraron un árbol en la carretera que une la parroquia de Galdo con Bravos, en Ourol, y el martes por la noche lograron quitar la obstrucción de una canalización atascada para aliviar el desborde de un pequeño regato en Fondón, en la parroquia de Magazos, debido al riesgo de inundación que existía para las viviendas próximas, aunque precisan que finalmente el agua no llegó a afectar a las mismas. Ese día retiraron unas uralitas que soltó el viento en una casa de Landrove.

Los bomberos de Barreiros, que colaboraron en la retirada de árboles que podían obstaculizar el paso en vías de Mondoñedo, también cortaron otro en la parroquia de Vilamartín Grande de Barreiros y ya por la tarde, con la asistencia de la Policía Local de Ribadeo, acudieron a una aldea entre Noceda y A Devesa por lo que parecía una acacia que invadía por completo la carretera, aunque su desplome no ocasionó ni heridos, ni daños.

En general, la de ayer fue una jornada apacible, en comparación con la del martes, en la que los vientos amainaron, -hubo un aviso verde en O Fiouco de la Autovía del Cantábrico (A-8) por la mañana y ráfagas de unos 120 km/h, que luego pasaron a poco más de 100 en Penado do Galo, en Viveiro y a 90, en A Pontenova-.

De las 51 incidencias registradas por el temporal en Lugo, nueve ocurrieron en Barreiros y tres, en Ribadeo, según el 112. La temperatura del agua en Ribadeo estuvo a 13 grados. El viento soplará este jueves con intensidad de sudoeste y habrá mar de fondo.

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