Dos calderones tropicales, una especie propia de aguas canarias, vararon en el arenal focense de Os Xuncos, donde terminaron falleciendo a pesar de los esfuerzos de los vecinos y de personal de salvamento por devolverlos al mar.
Los cetáceos ya fueron avistados el martes por socorristas de la vecina cala de As Polas, que hicieron un seguimiento en previsión de que pudieran llegar a la orilla, como sucedió a la noche donde, con ayuda de varias personas, lograron que volvieran al mar.
"Non foi fácil, porque era xa noite pechada e o mar estaba complicado", explican desde Protección Civil de Foz, al frente del rescate, que continuó en la mañana de este miércoles, cuando detectaron al cetáceo de menor tamaño en la playa.
El más grande se divisaba desde el arenal, porque quedó entre unas piedras, sin vida, y fue sacado con la ayuda de una moto de agua del GES de Cervo. Personal del Cemma, la Coordinadora para el Estudios de los Maríferos Marinos, se desplazaron hasta Foz para tomar muestras de los cuerpos para realizarles la necropsia, unos cadáveres que fueron evacuados a Burela por la mayor dificultad que presenta Os Xuncos para el acceso de la embarcación de salvamento Saturno.
A la espera de los resultados, el cetáceo de mayor tamaño parece ser una hembra adulta, mientras que el otro es un macho juvenil. Los dos, como sucede en estas especies, viajan siempre en grupo, aunque confían en que sean los únicos que aparezcan varados.
