El administrador judicial que el 9 de agosto tomó el control de las factorías de Aalu Ibérica en A Coruña y Avilés por mandato de la Audiencia Nacional comunicó este viernes a los comités de empresa el cierre temporal de las instalaciones, una medida que entró en vigor por la tarde. ¿La razón? La falta de actividad y la "incertidumbre" que pesa sobre "el estado exacto de liquidez disponible", un flujo de dinero necesario para mantener las condiciones de salud y seguridad del plantel «en estado óptimo», indicó el comité herculino.
En total, unos 310 empleados de A Coruña y 260 de Avilés se fueron a casa con una licencia retribuida y se desconoce si podrán regresar al tajo visto que todo indica que se impondrá la solicitud del concurso de acreedores.
Además de la nula carga de trabajo, los detonantes de la decisión fueron dos. La reducción del servicio médico en las dos factorías al turno de mañana ante los impagos acumulados por el Grupo Riesgo, que fue apartado de la dirección por orden de la Audiencia Nacional.
A esto se suma el despido de los empleados de la limpieza, un servicio que desempeñaba en ambas plantas Logiplus Worldwide, una empresa del holding de Riesgo en la que la matriz aplicó este mes un expediente de regulación de empleo extintivo. Ante el impago generalizado de la extra de verano y de la nómina de agosto y la incertidumbre que rodea las plantas, los comités de empresa han reclamado a la Xunta, al Principado y al Ministerio de Industria una reunión urgente, según confirmaron este viernesfuentes de la planta avilesina.
