Dirección y comité de Alcoa celebraron este lunes la primera de las reuniones diarias con el fin de avanzar en las medidas a llevar a cabo en la planta de San Cibrao, para reducir la incidencia ante un posible contagio de coronavirus. Algunas ya están en marcha, como el cierre del comedor, pero otras llevará días ejecutarlas, entre ellas la realización de un listado del personal con patologías previas para poder ser los primeros en dejar de trabajar.
El presidente del comité, José Antonio Zan, reconoce que el objetivo es minimizar los riesgos, por lo que se está intentando que haya el mínimo personal en planta y que este no se cruce, por lo que este mismo lunes desde la empresa se mandaron autobuses más grandes para el transporte de su plantilla, con el fin de que los operarios se pudieran sentar a una cierta distancia, que se mantiene también en la subida y bajada de los autocares que, tras su uso, son desinfectados, al igual que las zonas comunes.
También entró en vigor el horario intensivo para los empleados de jornada normal con el fin de poder clausurar el comedor y evitar aglomeraciones. Una medida a la que se prevé sumar una entrada y salida escalonadas, con el fin de que no coincida tanta gente a la vez después de cada turno. Se estudian además ampliar los teléfonos para que se compartan lo menos posible, dotar a cada trabajador de un kit de limpieza e incluso evitar el paso por el vestuario, acudiendo con ropa de trabajo desde casa, y tampoco se descarta eliminar barreras susceptibles de focos de contagio, como puertas en los casos en que sea factible.
Entre las medidas para evitar contagios estudian la eliminación de las puertas y dotar a cada trabajador de un kit de limpieza
A ello, suman elaborar un listado de los trabajadores que ya presenten una patologías previas, que el servicio médico ya está evaluando caso por caso, al igual que la conciliación familiar.
"Todavía hay muchas cosas por pulir y aún se tardará unos días en poder organizar todo", asegura el presidente del comité, a lo que la empresa agrega que se están poniendo todos los medios para tratar de que Covid-19 no avance. Es algo que considera vital también el comité, que lucha por el mantenimiento de la fábrica.
AUXILIARES. Una visión muy distinta es la que ofrecen las empresas auxiliares, cuya plataforma coordinadora de trabajadores muestra su "descontento" con la gestión de la crisis por parte de la multinacional, pues dicen que lejos de reducirse "ao mínimo posible" la presencia de trabajadores en planta "busca a maneira de aumentar quendas e presenza en horas de empregados, que se están vendo obrigados a facer nalgúns casos incluso horas extraordinarias".
No es la única crítica pues dicen que no se descontaminan máquinas expendedoras y de agua, y que "hai que pasar por un torno que abren con sistema dactilar, pasando o dedo por onde foi posto o de outros". Una cuestión que se estudia eliminar, pero que no dio tiempo a comunicar a las auxiliares, aunque se desinfectan las manos antes y después del uso.
